MÁLAGA, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
La empresa mixta Limasa ha certificado que sólo se están cumpliendo en torno al 40 por ciento de los servicios mínimos fijados por la Junta para la huelga de limpieza convocada por los trabajadores. Por ello, a petición del Ayuntamiento de Málaga --tiene el 49 por ciento del accionariado y es, a su vez, su único cliente--, solicitará al Gobierno andaluz que garantice su ejecución íntegra o, en su defecto, que los aumente para que esto sea posible.
Así lo han trasladado este jueves, tercer día ya de la huelga de limpieza, el alcalde, Francisco de la Torre, y el concejal de Sostenibilidad Medioambiental, Raúl Jiménez, quienes, además, se han mostrado "abiertos al diálogo" cuando "los trabajadores quieran dialogar".
De hecho, el regidor malagueño, que ha aludido a "un uso excesivo del derecho de huelga", ha considerado que es quizá oportuno que el comité de empresa de Limasa "reflexione" y sea el que dé un paso adelante para seguir negociando, aludiendo al "corte un poco abrupto que hicieron de la reunión del pasado martes".
Durante este pasado miércoles, segundo día de huelga, quedaron de nuevo incumplidos los servicios mínimos del 50 por ciento en el centro y del 40 por ciento en el resto de barrios debido a averías en los vehículos o en los contenedores tanto de carga como soterrados. "Incidencias que quiero pensar que no están provocadas", ha dicho el alcalde.
Según la información aportada por Limasa, el 1 y el 2 de marzo se han cogido 503 toneladas de residuos en la ciudad. Así, a la finalización de la segunda jornada de huelga quedaban sin recoger en los diferentes contenedores un total de 1.222 toneladas de basura, lo que supone el 29,1 por ciento de lo habitual en el mismo periodo de tiempo.
Del turno de la noche sólo finalizaron la tarea seis de los 18 equipos que salieron de servicio --cumplimiento de un 33 por ciento de los servicios mínimos--; en el de la mañana la terminaron diez de los 17 --53 por ciento--, y en el de la tarde completaron el trabajo cuatro de los ocho grupos de recogida --50 por ciento--.
"Con esos servicios mínimos reales es difícil recogerlo todo, quedándose en torno al 70 o al 80 por ciento de la basura pendiente de recoger", ha declarado De la Torre, confiando, en este punto, en la colaboración ciudadana para tratar de "retener en casa durante un tiempo" los residuos.
El objetivo ha de ser, a su juicio, que "si los trabajadores han decidido que haya huelga, la ciudad pueda funcionar lo mejor posible". Por ello, se insiste a la Junta en incrementar los servicios mínimos para que de verdad se cumplan los fijados.
Por el momento, no se plantean la contratación de empresas para retirar residuos en puntos críticos donde pueda haber problemas de seguridad y salubridad, tal y como se hizo en la huelga de diciembre de 2013. De la Torre ha señalado que "hoy por hoy no se está estudiando eso" y "espero que no sea necesario".
Precisamente, preguntado por la posibilidad trasladada por los empresarios de los polígonos y los hosteleros del centro de adoptar ellos mismos medidas alternativas para evitar los perjuicios de la acumulación de basura, ha indicado que "es un tema de libertad de acción".
NEGOCIACIÓN
De la Torre, que ha reiterado sus críticas hacia la Junta por no haber inscrito como convenio colectivo el principio de acuerdo que permitió desconvocar la huelga de la Navidad de 2013, ha hecho de nuevo un llamamiento a los trabajadores "a la responsabilidad, a la reflexión, a la moderación, al sentido del civismo y a la madurez".
Al respecto, el alcalde malagueño ha comentado que, "aunque el derecho a la huelga es un derecho constitucional clarísimo, en un servicio tan sensible como éste hay que hacer un uso moderado de él y justificado".
Así, ha reiterado que la plantilla de Limasa "no ha perdido poder adquisitivo en los años de crisis y sí los funcionarios municipales --un 10 por ciento-- y los ciudadanos en general". Además, ha dejado claro que "lo que se pide tiene que salir de un presupuesto que es de todos los malagueños y que sirve para mil cosas".
"Habría que preguntar a los vecinos hasta qué punto las comunidades donde se podrían poner ascensores aceptan que no se pongan" para, sin embargo, atender las demandas económicas de la plantilla de Limasa, ha apuntado. Y es que, tal y como ha aclarado, "no defendemos el dinero del Ayuntamiento, sino que es el dinero para la ciudad".
Ha reiterado que "el presupuesto municipal de 2016 está elaborado, comprometido y negociado con los demás grupos para su aprobación, por lo que no hay margen de maniobra". Pese a esto, ha agregado, "sí proponemos llegar más lejos donde no tenemos un presupuesto cerrado, que es en 2017 y 2018".
Las propuestas ofertadas por el equipo de gobierno supondrían un desembolso para el Ayuntamiento en los próximos tres años de 11,6 millones --2,2 millones en 2016; en 2017, un total de 4,4 millones, y de cinco millones en 2018--.
"Un esfuerzo considerable, recogiendo muchos puntos de sus peticiones", ha aseverado. El principal obstáculo para el acuerdo se encuentra en la paga de productividad, parte de la cual los sindicatos exigen recuperar en este mismo 2016, lo que conllevaría un sobrecoste para el Ayuntamiento de 1.064.000 euros.
IMAGEN DE LA CIUDAD
Ante la proximidad de la Semana Santa, que se celebrará del 20 al 27 de marzo, el regidor ha admitido que "en cualquier ciudad del mundo una huelga de limpieza afecta a su imagen". "Trataremos de compensar esa afectación --ha afirmado-- diciendo la verdad: que Málaga es una ciudad maravillosa en huelga de limpieza ahora mismo".
De todos modos, ha confiado en que no se prolongue hasta la Semana de Pasión y ha advertido de nuevo de que también "perjudica a los trabajadores", que tienen "unos ingresos menores" al secundar la huelga. "Éste es un elemento que debe pesar en la decisión del comité por responsabilidad con sus compañeros", ha expuesto.
Sobre la posibilidad, tal y como ocurrió en el anterior paro, de que esa pérdida de ingresos por parte de la plantilla fija fuera compensada con horas extras para la recuperación de la ciudad una vez desconvocada la huelga, De la Torre ha dicho que "no queremos entrar en ese escenario porque aún es pronto", y ha advertido, de todos modos, de la necesidad de "tener en cuenta la opinión de los vecinos".
"Un porcentaje muy alto de los vecinos no entiende este conflicto y eso hay que tenerlo en cuenta a la hora de tomar decisiones sobre posibles compensaciones porque al final son los ciudadanos los sufridores de toda esta historia y son los que con sus impuestos sostienen el Ayuntamiento, que tiene contratada a esta empresa mixta", ha manifestado.