MÁLAGA 15 May. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de Málaga ha rebajado la petición de pena de 11 a dos años de prisión para una mujer por incendiar la casa en la que vivía su novio, con él dentro, después de haber tenido una discusión con el hombre. La defensa se ha pronunciado de acuerdo con el fiscal, una vez que la mujer ha reconocido los hechos, alegando que estaba bajo los efectos del alcohol y de un tratamiento psicológico de pastillas.
El juicio se ha celebrado este jueves en la Sección Tercera de la Audiencia de Málaga. Los hechos sucedieron en abril de 2011. La acusada tuvo una discusión con su pareja en la casa de la capital malagueña, que estaba en estado de abandono, en la que el hombre residía, tras lo que le dijo que iba a "meter fuego" a la vivienda con él "dentro". Ese mismo día por la noche, lo hizo.
La mujer ha reconocido los hechos, pero ha explicado que lo hizo bajo los efectos de la medicación que tomaba en su tratamiento para dormir y el alcohol que había consumido; además de que ha asegurado que quería suicidarse, por eso se tomó más pastillas. Ha indicado que prendió fuego a la vivienda tras la pelea con su compañero, al que "quería", con el que sigue conviviendo y con el que tiene dos hijos.
Asimismo, ha dicho que no era muy consciente de lo que hacía y que "si hubiera estado bien no lo habría hecho". El fiscal pedía en su escrito inicial, al que tuvo acceso Europa Press, 11 años de prisión para la mujer, al acusarla de un delito de incendio con peligro para personas o bienes; pero ha modificado sus conclusiones tras la celebración del juicio.
Así, la acusación pública ha incluido en su relato que la mujer tenía en el momento de los hechos un trastorno lo que, unido a la intoxicación por sustancias, "disminuía sus facultades", por lo que ha incluido una circunstancia que atenúa la pena, solicitando finalmente la pena de dos años de cárcel, con la que la defensa se ha mostrado conforme y a la que la mujer será condenada.
Además, el fiscal instaba inicialmente al pago de 6.000 euros de indemnización a la Junta de Andalucía por los daños causados en el inmueble, pero se ha retirado esta petición, puesto que el representante de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (EPSA), propietaria del inmueble, ha declarado que no se reclama ya que no se han hecho reformas en el edificio, puesto que se va a derribar.