Selwo celebra el Día de las Serpientes y desmonta prejuicios sobre estos reptiles claves en los ecosistemas

Archivo - Imagen de una boa esmeralda.
Archivo - Imagen de una boa esmeralda. - SELWO - Archivo
Europa Press Andalucía
Publicado: miércoles, 16 julio 2025 17:57

MÁLAGA 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

Los parques Selwo en la provincia de Málaga celebran este 16 de julio el Día de las Serpientes, y lo hace con una familia reptil, específicamente de serpientes, que está muy bien representada tanto en Selwo Marina (Benalmádena) como en Selwo Aventura.

Desde la boa cubana (Epicrates angulifer) a la pitón birmana, la serpiente del maíz o la boa esmeralda, la variedad de serpientes constituye un gran atractivo en ambos zoológicos. Sobre todo para los visitantes que no han tenido oportunidad de contemplar a estos reptiles nunca, o incluso han desarrollado cierta fobia hacia ellos.

En este sentido, desde los parques Selwo en la provincia de Málaga consideran que celebrar el Día Mundial de la Serpiente, es una excusa perfecta para combatir prejuicios contra ellas. Cada 16 de julio se trata de crear conciencia en torno a las serpientes, tan temidas por los seres humanos, pese a ser unas grandes desconocidas.

En Selwo Aventura existe una actividad denominada 'Encuentro con serpientes', en el que el personal de educación explica el importante papel que éstas juegan para mantener el equilibrio de los ecosistemas desde hace 140 millones de años. En estas actividades educativas se desmontan muchas ideas preconcebidas en torno a estos maravillosos reptiles.

Sean venenosas o no, su alimentación se basa en insectos u otros animales, es decir, son insectívoras o carnívoras, con especial predilección por ratones, pero también por otros reptiles o anfibios como lagartijas o ranas.

Se estima que en el mundo existen 3.000 especies distintas de serpientes (la longitud y el peso pueden variar muchísimo), presentes en todos los continentes a excepción de la Antártida.

CURIOSIDADES SOBRE LAS SERPIENTES

En los encuentros educativos se toca ampliamente el tema de las serpientes, haciendo hincapié en cómo la cultura popular las ha estigmatizado en exceso (una de las acepciones del DRAE de "víbora" es "persona con malas intenciones"), incluso cuando se le atribuyen cualidades como la precaución.

Porque efectivamente, estos vertebrados, cuya visión nocturna es mejor que la de otros animales, prefieren tenernos a los humanos lo más lejos posible (les sobran motivos). Hay culebras como la serpiente del maíz que hacen vida nocturna y bajo tierra, en el sureste de Estados Unidos.

Precisamente en el oeste estadounidense (California) o en países como Australia se las protege especialmente, siendo venenosas incluso, puesto que en estas zonas son conocedores de su papel en el equilibrio medioambiental. Y eso que en Australia y Papúa Nueva Guinea reside una de las más tóxicas del mundo: la serpiente costera taipán (Oxyuranus microlepidotus).

Las hay que tienden emboscadas, matando por constricción, como la solitaria anaconda amarilla (Eunectes notaeus), que además posee un sentido del olfato finísimo que le permite encontrar mejor sus presas. Otras familias solo se agrupan durante la hibernación, como la falsa coral (Lampropeltis triangulorum), oriunda de los bosques tropicales de México, América Central y Sudamérica, entre otros lugares.

En el Extremo Oriente, nos encontramos con la pitón birmana (Phyton bivittatus), cuyo hábitat son los ríos, marismas, pantanos y lagos. Es, también, una de las serpientes más grandes del mundo. O la boa cubana, especie endémica de la isla que le da el nombre; principal depredadora de un roedor, la jutía cubana, y clave por lo tanto a la hora de evitar plagas en el ecosistema insular.

Otras, como la pitón de Seba o pitón africana de roca (Phyton sebae), habitante del África subsahariana, son realmente tragonas: capaces de engullir impalas de hasta 60 kilogramos, o leopardos. Suele sumergirse en el agua para cazar.

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