Susana Díaz critica la "disputa política" por el pase a Fase I de Málaga y Granada que espera este viernes

SEVILLA 15 May. (EUROPA PRESS) -

La secretaria general del PSOE de Andalucía, Susana Díaz, se ha declarado "convencida" de que las provincias de Málaga y Granada van a pasar desde el próximo lunes, 18 de mayo, a la Fase I del plan de transición hacia la "nueva normalidad" de la crisis del coronavirus, como ha solicitado el Gobierno andaluz al central, pero ha lamentado que ambos territorios hayan entrado esta semana "en la disputa política" tras la decisión del pasado viernes del Ministerio de Sanidad de mantenerlas en fase cero.

En una entrevista en La Sexta, recogida por Europa Press, la dirigente socialista ha defendido el modo de proceder del Ministerio de Sanidad, que, en su opinión, se ha guiado por el "criterio fundamental" de "proteger la salud de malagueños y granadinos".

Frente a ello, ha criticado que el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, "haya utilizado a Málaga y Granada para acompañar" al presidente del PP, Pablo Casado, en su "campaña de acoso contra el Gobierno" de Pedro Sánchez.

En esa línea, Susana Díaz ha rechazado que pueda haber habido criterios políticos --como ha sostenido la Junta-- para explicar la decisión de Sanidad de no autorizar la semana pasada el pase a Fase I de Málaga y Granada, cuando el PSOE gobierna en dichas provincias en "el doble de municipios que el PP".

Por eso, para la secretaria general del PSOE-A, lo que ha habido en torno a la promoción de ambas provincias a la siguiente fase de la desescalada es "mucha irresponsabilidad", porque desde la Junta se ha puesto a estos dos territorios "en el escaparte para no contar la verdad", que, según ha continuado, era que "el Gobierno andaluz no había hecho su tarea, no había sido transparente y no habían contado los criterios y las circunstancias en las que se encontraban esos distritos sanitarios, cosa que han denunciado hasta los propios médicos de Granada en estos días", según ha apostillado Susana Díaz.

La líder de los socialistas andaluces ha defendido que en el proceso de desescalada de una pandemia como lo del coronavirus, "lo importante es la salud de las personas", y "esto no va de agravios, sino de salvar vidas" y "conseguir cuanto antes superar la alerta sanitaria" para recuperar "nuestra vida cotidiana, pero protegiendo vidas", según ha insistido.

"ALGO SE HA HECHO MAL" EN ANDALUCÍA

Sobre la situación de la pandemia en Andalucía, Susana Díaz ha insistido en criticar que, pese a que "en el sur el virus ha entrado con menos fuerza", la comunidad cuenta con "diez puntos más de profesionales sanitarios contagiados que la media de España"; "el 40% de los fallecidos andaluces lo han sido en residencias de mayores", y "en Cádiz hay más profesionales sanitarios contagiados que ciudadanos", todo lo cual demuestra, a su juicio, que "algo se ha hecho mal" por parte de la Junta.

Según ha argumentado, a los andaluces "nos ha venido mal la falta de planificación, de previsión y de desarrollo de sus competencias por parte del Gobierno" andaluz, y en esa línea ha defendido que, "si en lugar de pelearse tanto con Pedro Sánchez, y de estar en la confrontación con el Gobierno de España, hubiese estado centrado en sus tareas, haciendo sus deberes, seguramente hoy no tendríamos 8.000 sanitarios contagiados en Andalucía".

También ha criticado la "descoordinación" del Ejecutivo andaluz en torno a la apertura al baño de las playas, sobre la que "han dicho de todo", cuando "lo más importante es que se abran en las mejores condiciones para garantizar el turismo de calidad" en Andalucía. Además, ha advertido de que las comunidades insulares de Canarias y Baleares "nos llevan la delantera y están muy por delante de Andalucía" en esta materia mientras en la Junta están en "un baile de días" para la apertura de playas.

Finalmente, al ser preguntada sobre qué habría hecho en esta crisis de forma distinta que el actual Gobierno de PP-A y Ciudadanos (Cs) de haber seguido siendo presidenta de la Junta, Susana Díaz ha respondido que habría actuado con "mucha más transparencia con todo el mundo; con la oposición, con los ayuntamientos y con los andaluces", y, por otro lado, habría propiciado el "diálogo y la lealtad de verdad", según ha zanjado.