SEVILLA, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Empresarios de la Construcción (Fadeco) estudia poner en marcha, en colaboración con la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa y gracias a un convenio suscrito esta semana entre ambas entidades, unos sistemas de calificación energética y de análisis medioambiental en las nuevas promociones para favorecer la construcción y mantenimiento eficiente de ecourbanizaciones.
En concreto, este proyecto, cuyo desarrollo aún no es definitivo, y se decidirá en un plazo de un mes, forma parte junto con 'Aplicaciones TIC soporte para gestión de promoción inmobiliaria' y 'Análisis del impacto de tendencias vanguardistas en sistemas constructivos' de las tres primeras iniciativas, de las que sólo saldrá una adelante, conjuntas de la Consejería y la patronal andaluza para fomentar en este sector la I+D+i.
Según los datos del proyecto, a los que ha tenido acceso Europa Press, esta iniciativa integra tareas de investigación, desarrollo y transferencia tecnológica que, partiendo de las necesidades actuales en materia de reducción de consumo energético y de impacto medioambiental, y tomando como referencia actuaciones internacionales vanguardistas, desarrollen sistemas de calificación de viviendas que garanticen mayores niveles de confort y de calidad del usuario final.
De esta forma, los objetivos del proyecto incluyen la unificación de los nuevos criterios bioclimáticos exigidos para la Certificación Energética, y el desarrollo de modelos de predicción de consumo energético y de impacto medioambiental en la vida útil de las edificaciones.
Para ello, se analizarán los beneficios de la aplicación de nuevas tecnologías para un mejor aprovechamiento de las energías renovables utilizables en los distintos entornos climáticos identificados en el contexto andaluz.
De esta forma, el ahorro energético se verá posibilitado por la implantación de nuevas tecnologías que aseguren un comportamiento ecológico de la vivienda, abarcando desde el aprovechamiento de las energías limpias hasta la mejora de los aislamientos, de tal manera que la relación entre la temperatura deseada en la vivienda y el consumo de energía externa a la ecourbanización se encuentre en unos valores aceptables.
Igualmente, esto se traduce en una reducción del uso de energías renovables y por tanto de las emisiones de gases nocivos de las diferentes centrales térmicas, que a largo plazo se verá reflejado en el clima. Así, valores aceptables deberán ser determinados, generándose nuevos reglamentos al respecto.
En este sentido, Andalucía dispone de diversas fuentes de energía renovable como la solar, eólica, hidráulica, mareomotriz, biomasa, de forma que la incorporación de criterios bioclimáticos en la promoción, en especial energía solar térmica, fotovoltaica y eólica permitirá ahorrar hasta un 60 por ciento en el consumo de energía diaria, lo que supone una reducción importante en los gastos mensuales de la unidad familiar usuaria.
Recientes estudios muestran que la construcción de viviendas ecológicas puede llevar a incrementar el precio de las mismas en un factor del orden del tres por ciento en el caso de pisos y hasta el diez por ciento en viviendas unifamiliares, frente a los construidos de forma convencional. Sin embargo, el ahorro derivado de la reducción del consumo eléctrico en la ecourbanización, amortiza en diez años el incremento del precio de la vivienda.
Finalmente, los beneficios de la implentación de los resultados de la investigación en la construcción se traducirán en una mejora del confort de las viviendas, así como una reducción del consumo energético y del impacto ambiental de los edificios, lo que repercute positivamente en la calidad de los usuarios finales. Otros beneficios son la creación de nuevos puestos de trabajo para el sector energético a todos los niveles, es decir, investigación, diseño e instalación.
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