Fundación Blas Infante renuncia a parte de los suelos donde fusilaron al andalucista en Sevilla para pagar su monumento

Actualizado: lunes, 16 enero 2006 15:18

El monolito estará listo el 10 de agosto, "tras 23 años de calvario", 12 juicios por los terrenos y ninguna ayuda económica de la Junta

Morera & Vallejo sufragará los costes de la escultura y las obras a cambio del suelo, donde se quería hacer un centro de actividades

SEVILLA, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Blas Infante anunció hoy que este año se terminará el monumento que comenzó a levantarse en 1983, en el kilómetro 4 de la antigua carretera de Carmona --donde fue fusilado el padre de la patria andaluza-- gracias a un convenio suscrito con la consultora Morera & Vallejo, por el que esta compañía se compromete a sufragar los costes de la escultura y las obras, a cambio de unos terrenos en la zona, donde la institución privada quería construir un centro de actividades.

El vicepresidente de la Fundación, Pedro Ruiz-Berdejo, explicó a Europa Press que el próximo 10 de agosto, cuando como cada año se conmemore la muerte del fundador del andalucismo en este enclave, estará concluido el conjunto monumental, para lo que "hemos tenido que pasar 23 años de calvario, 12 juicios relacionados con la propiedad de los terrenos y un sinfín de problemas, que parece que ya terminan".

En concreto, después de varios cambios en el proyecto original del arquitecto José Ferrari, finalmente se colocará una escultura de bronce de Blas Infante de dos metros de altura, frente al monolito que ya se encuentra instalado en el lugar, que tiene grabadas unas palabras de 'Ideal Andaluz' y cuenta con un dosel coronado por 12 palomas del mismo material. Además, rodeando la efigie se colocarán ocho grandes piedras, que representarán a cada una de las provincias andaluzas.

En un primer momento, en los años 80, el diseño incluía un templete, en el que se preveía introducir una estatua de Blas Infante escapando de unas garras que lo aprisionaban. Este conjunto iba a estar circundado por ocho fuentes, representando los territorios de la comunidad. Sin embargo, las expropiaciones llevadas a cabo en estos terrenos por parte del Ministerio de Fomento para la construcción de la SE-30 obligó a la Fundación a ir recortando el espacio del monumento y variando el proyecto.

Así, a principios de los años 90 se descartó el templete, se suprimieron las garras, optando por una figura del padre de la patria andaluza "más gloriosa" y sin ningún simbolismo, y los surtidores se sustituyeron por ocho murales sobre mármol, que mostrarían respectivamente un momento histórico relevante de cada una de las provincias. Ya en 2005, se volvió a modificar el diseño y los murales se sustituyeron por las ocho piedras, de un metro cada una.

Preguntado sobre la colaboración de la administración andaluza en esta iniciativa, Ruiz-Berdejo señaló que la Junta "no nos ha ayudado en nada para la construcción del monumento" y recordó que "únicamente el ex consejero de Cultura José María Martín Delgado empezó a trabajar con nosotros, pero no se llegó a nada". En este sentido, precisó que sí se ha recibido ayuda de la administración para trámites administrativos y a la hora de proteger la zona como lugar histórico, aunque nunca han recibido fondos. A este respecto, recordó que todos los partidos acuden al acto del 10 de agosto a "depositar flores y leer discursos" frente al monumento.

En este contexto, el vicepresidente lamentó que representantes de otras autonomías que han visitado la Fundación, manifiesten cuando conocen esta circunstancia que "no se pueden creer" que el Gobierno andaluz no haya colaborado para levantar ese monumento a Blas Infante.

No obstante, gracias a la cesión de los terrenos a Morera & Vallejo, firmada en 2005, se podrá concluir el espacio, aunque la entidad haya tenido que renunciar a su intención de construir en esos suelos un centro para celebrar reuniones literarias y actividades científicas y divulgativas sobre el andalucista.

La Fundación compró en 1983 los terrenos donde fue fusilado Blas Infante a la viuda José García Rodríguez, torero conocido como el Algabeño, "perteneciente al Movimiento", según expuso. En estos años, la entidad ha tenido que acudir en varias ocasiones a los tribunales para impedir que pasara por ese lugar el alcantarillado, conducciones de gas, al margen de las expropiaciones ejecutadas por el Ministerio de Fomento para la Exposición Universal.