SEVILLA, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Instituto Internacional de San Telmo ha clausurado este sábado la XLI promoción de su Programa Intensivo de Dirección de Empresas (PIDE), cuya lección magistral ha tenido lugar a las 12,00 horas en la sede de la institución en Sevilla, a cargo del directo general de Etiquetas Macho S.A, y antiguo alumno de esta escuela de negocios, Juan Macho Rodríguez-Buzón.
En una nota, el Instituto ha informado de que tras la bienvenida a los asistentes por parte del presidente de la Fundación San Telmo, Eustasio Cobreros, y la entrega de diplomas, llegó el turno de la lección magistral, en la que Macho ha agradecido al Instituto la invitación para impartir esta lección magistral y ha dado la enhorabuena a los participantes.
Macho ha compartido con los asistentes los recuerdos de su paso por las aulas del Instituto I. San Telmo así como las enseñanzas aprendidas. "El primer programa que realicé me sirvió muchísimo porque yo tenía 33 años y seguía teniendo muchas ganas y mucha necesidad de aprender", ha explicado, a la vez que ha señalado que "San Telmo no hace milagros si no le pones empeño y esfuerzo, yo le dediqué muchas horas a estos programas y los concluí con las expectativas cumplidas".
Juan Macho ha dividido su intervención en una serie de puntos que considera "fundamentales" como empresario familiar. El primero de ellos lo ha dedicado a la sucesión, hablando de cómo su padre comenzó con el negocio en 1957 y de la forma en la que lo persuadió para que se hiciera cargo de él cuando terminara sus estudios. "Sabía que lo idóneo era contar con alguien de la familia preparado y pensó en mí por ser el mayor de mis cuatro hermanos". "Acepté el reto y nunca me he arrepentido de ello."
El liderazgo ha formado parte de su segundo punto. Para el director general de Etiquetas Macho "no hay que confundir jefe con líder, pues hay propietarios o directores generales que nunca llegan a ser líderes".
Así, ha destacado que "el líder tiene que ser un ejemplo para los demás con valores como el esfuerzo, la constancia, la perseverancia, el ejemplo, la humildad, el conocimiento, la habilidad, la comunicación, la honradez, la coherencia, o la amabilidad".
Su tercer punto lo ha destinado a la importancia que tenían las opiniones y recomendaciones de los clientes, argumentando la forma en la que habían implantado nuevos procesos de fabricación sólo por la visión y comentarios de algunos de ellos. "Gracias a estos cambios de nuestros clientes hoy ofrecemos una gama de productos más extensa entre etiquetas encoladas, etiquetas adhesivas y sleeves", ha detallado.
"Para llevar a cabo las inversiones que hemos desarrollado en los últimos años, hemos tenido que viajar para conocer nuevas tecnologías", ha explicado Macho al comienzo de su cuarto punto en referencia a los proveedores. Para Juan Macho visitar ferias y exposiciones, conocer las fábricas de sus proveedores tanto de maquinaria como de materia prima, ha sido "una de las mayores fuentes de información y formación tecnológica que tienen en la actualidad".
Adaptarse a los cambios ha sido el siguiente punto tratado por Juan Macho, que ha indicado que la complacencia "no ayuda y que hay que seguir todas las tendencias que marque el mercado, pues sólo así podremos hacer frente a la competencia".
El sexto punto lo ha destinado a los empleados, de los que mantiene que primero hay que fidelizarlos a ellos para así, poder fidelizar al cliente. Para Juan Macho en la empresa que dirige se preocupan mucho de los recursos humanos "somos conscientes que sin el esfuerzo de nuestros 125 empleados no podríamos haber llegado donde estamos".
Por ello, ha afirmado hacer promoción interna y no darse por vencido con personas que no entienden su modelo de negocio, basado en el servicio. En este sentido, ha añadido que las empresas familiares, como lo es Etiquetas Macho, suelen tener este aspecto "tremendamente en cuenta".
Por último, ha concluido su intervención agradeciendo a sus padres la educación y valores con los que contaba, y a sus hermanos "la confianza que le habían demostrado siempre". Asimismo, se ha dirigido a los alumnos a los que ha dicho: "mucho ánimo, esfuerzo, perseverancia y humildad para que consigáis todos vuestros objetivos y retos personales y profesionales".
EL PROGRAMA PIDE
El Programa clausurado está dirigido a empresarios y ejecutivos que ocupan puesto directivos en pequeñas y medianas empresas, con frecuencia de origen familiar, que no necesariamente poseen estudios superiores. Su principal bagaje de conocimientos reside en su experiencia empresarial, que no debe ser inferior a cinco años, acumulados a lo largo de su práctica diaria.
El PIDE tiene como objetivo ofrecer una completa formación empresarial a quienes aspiran a ocupar puestos de mayor responsabilidad en la dirección de las empresas.
De este modo, los profesionales que ingresan en el Instituto para realizar este Programa tienen características comunes entre las que se encuentran iniciativa, capacidad de esfuerzo, y deseos de asumir responsabilidades y nuevos retos.
