SEVILLA, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
IU ha manifestado este martes su rechazo a la celebración en Sevilla de la siguiente edición del Congreso Europeo de Guerra Electrónica, previsto en la capital andaluza del 25 al 27 de mayo de 2021.
El evento, según la organización de izquierdas, iba a celebrarse en Liverpool (Reino Unido) durante este mes de noviembre pero no llegará a celebrarse "después de una potente campaña ciudadana que ha logrado que se suspenda", si bien la organización del congreso explica en su página web que la decisión de suspenderlo deriva de las prevenciones frente a la pandemia.
"Los requerimientos actuales de dos semanas de cuarentena después de viajes internacionales y las posibles modificaciones del Gobierno de Reino Unido respecto a la reapertura de conferencias y muestras han contribuido a esta decisión", indica la organización del evento atribuyendo la cancelación del mismo en Liverpool al "impacto" de la pandemia.
No obstante, IU asegura de su lado que la cancelación del evento de Liverpool es fruto de una "victoria del movimiento pacifista y antimilitarista de Reino Unido".
Frente a la programación del mismo en Sevilla en mayo de 2021, IU
indica que "esta feria de armamento tiene como principal patrocinador a Elbit, la empresa de seguridad" de Israel, entre otras.
"Nos sumamos al llamamiento de la Plataforma de Sevilla contra la Guerra, con el objetivo de aunar esfuerzos e iniciar una campaña contra la celebración de este tipo de ferias", señala IU lamentando "el servilismo de nuestras instituciones, que ya han ofrecido" el palacio de congresos de Sevilla "para su celebración y el desprecio para la población andaluza" a cuenta de los riesgos de la celebración de un evento así circulando el coronavirus Covid-19.
Así, critican que Sevilla vaya a acoger "una feria de armas electrónicas para la guerra y para el control de masas, es decir, un mercado donde se muestran y venden instrumentos para llevar la muerte y la desolación fuera de nuestras fronteras, de militarización del tratamiento a los refugiados e inmigrantes y de instrumentos de control de la población en el interior de nuestras propias sociedades. Un mercado contra la paz y contra las libertades democráticas".
