SEVILLA, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
IULV-CA ha expresado este miércoles ante el Pleno del Parlamento su rechazo a los Presupuestos andaluces para 2012, al entender que son "restrictivos, electoralistas, tramposos y poco creíbles", apuntando que se trata "de más de lo mismo". Para Izquierda Unida, esas cuentas "siguen la línea de los anteriores, y se intentan maquillar con una pátina de izquierdas que solo tiene un propósito electoral de enfrentamiento con la derecha".
El diputado de IULV-CA Ignacio García, que ha defendido la enmienda a la totalidad de su grupo al proyecto de Ley de Presupuestos, ha indicado que, con estos presupuestos, "lo público pierde peso en la economía y en la vida de Andalucía" y la Junta "renuncia a ejercer el liderazgo que le corresponde en la recuperación económica". La inversión, según ha apuntando, no sirve para crear empleo.
Ha denunciado además que el presupuesto andaluz para 2012 sitúa a Andalucía en una especie "de mundo ideal y en los mundos de yupi en los que la crisis parece que se va a resolver sola, aunque ni se sabe cómo". A su juicio, es además "muy grave" que no haya ninguna previsión sobre la evolución del empleo, sea positiva o negativa.
Para Ignacio García, las políticas del presupuesto andaluz de 2012, que es "restrictivo", suponen una continuidad fiel y la profundización en las recetas" aplicadas hasta ahora, cuya "incapacidad para salir de la crisis ha quedado contrastada".
Ha indicado además que el presupuesto plantea un "falso dilema: o políticas sociales o inversión". Según ha explicado, el dilema no debe ser, como mantienen el PSOE y el PP, empleo o políticas sociales, sino que el auténtico debate es cómo se sale de la crisis, si por la vía de la restricción presupuestaria, también en políticas sociales, o por la vía de asumir responsabilidades desde los poderes públicos y poner en marcha acciones de reactivación económica desde lo público.
Ha expresado su preocupación por la escasez de crédito para familias y pymes, y ha criticado la "falta de capacidad" desde el Gobierno andaluz para plantear un nuevo modelo económico a medio o largo plazo. Ha lamentado además el empecinamiento de los gobiernos español y andaluz en seguir a rajatabla las recetas "ultraliberales" para conseguir llamada estabilidad fiscal.
Tras indicar que no cree que se vaya a alcanzar el crecimiento del PIB previsto, ha indicado que el presupuesto también refleja un claro retroceso democrático en la medida en que "va para atrás en la descripción de las inversiones", apuntando que es muy grave que no se provincialicen las inversiones.
"DEBILIDADES" DEL PRESUPUESTO
En el capítulo de gasto, según ha señalado, es donde aparecen las debilidades del presupuesto de 2012 y se deja ver su "incompatibilidad con una política de izquierdas", ya que se renuncia a cualquier reactivación de la economía desde la administración pública.
Respecto a las políticas sociales, García ha señalado que si bien es cierto que suben en sus dotaciones, si se analiza la situación andaluza, el aumento en educación resulta muy insuficiente comparado con la inflación (un punto inferior) y con el previsible crecimiento del alumnado. En inversión por alumno, según ha apuntado, el sistema andaluz retrocede.
El parlamentario de IU-CA ha señalado que el Gobierno "renuncia" a la construcción de una red pública de escuelas infantiles y que todo se hace a través de conciertos y con la gestión de entidades privadas.
Ignacio García ha agregado que sanidad y vivienda sufren en los presupuestos un destacado estancamiento, y ha indicado que hay "políticas de recorte" camufladas bajo eufemismos. Ha asegurado que en Andalucía se están cerrando camas, "lo que es reducción de servicios"
Ha criticado además la fórmula de la colaboración público-privada para la construcción de infraestructuras que la Junta vuelve a plantear en los presupuestos, apuntando que este sistema de financiación "cada vez va peor".
Ignacio García tuvo palabras de recuerdo para su compañero de grupo Pedro Vaquero, de baja por enfermedad y que tradicionalmente ha defendido la posición de Izquierda Unida en este debate, lo que ha sido correspondido por un aplauso de todos los parlamentarios de la Cámara.
