Salud creará un observatorio para la seguridad de los pacientes y un sistema de notificación de casos adversos

Los centros asistenciales tendrán que dotarse también de un plan de seguridad que tendrá un "peso importante" en sus contratos-programa

Europa Press Andalucía
Actualizado: viernes, 3 noviembre 2006 15:17

SEVILLA, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Salud pondrá en marcha en el primer semestre de 2007, "casi con toda seguridad para la primavera" del próximo año, un observatorio para la seguridad de los pacientes, así como un sistema de notificación sobre posibles efectos adversos registrados en la asistencia diaria, según anunció hoy la titular del ramo, María Jesús Montero, quien justificó la puesta en marcha de esta nueva herramienta "en la necesidad de identificar los puntos a mejorar dentro del sistema sanitario público andaluza".

En rueda de prensa en Sevilla, Montero, quien quiso dejar claro en todo momento que esta nueva iniciativa "pretende establecer un cambio y pasar de una cultura punitiva a una cultura de aprendizaje de los errores", detalló que dicha estrategia estará organizada en torno a 24 grandes líneas de trabajo, las cuáles pivotarán en este observatorio para la seguridad de los pacientes "primero del tipo que se crea en España".

En este sentido, concretó Montero que dicho observatorio tendrá asignado un personal específico, el cual desarrollará físicamente sus laborales en la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía, al tiempo que se le dotará de un sistema de notificación de efectos adversos en los tratamientos, "que será registrado vía telemática al objeto de que podamos registrarlos para que no vuelvan a producirse".

En concreto, este sistema de notificación de casos adversos se nutrirá de los incidentes adversos que hagan constar de forma anónima tanto profesionales, como pacientes y cuidadoras dejen constancia. Además, avanzó que el observatorio recabará también información tanto a nivel nacional como internacional sobre los procedimientos sanitarios más seguros a seguir, los cuáles se difundirá entre los profesionales.

Junto a ello, señaló que entre el paquete de medidas de fomento de la seguridad asistencial se establecerá un control de identificación de los pacientes adultos durante su ingreso hospitalario, "priorizando a aquellos colectivos más vulnerables como los mayores, pacientes con trastornos neurodegenerativos o trastornos de movilidad, enfermos oncológicos, alérgicos o personas con problemas de nutrición", entre otros colectivos.

"La idea de esta iniciativa se fundamenta en la necesidad de identificar los problemas que se desprenden de la práctica médica diaria y no para culpabilizar a los profesionales", insistió la consejera del ramo, quien también aclaró que en la elaboración de este conjunto de medidas se ha contado con el asesoramiento de los propios profesionales sanitarios "los cuáles nos han trasladado los elementos más importantes a monitorizar y protocolizar".

De igual modo, aludió a los beneficios preventivos que este conjunto de medidas podrá reportar a la sanidad pública andaluza y subrayó que organismos como Aviación Civil "ya disponen de sistemas de alerta similares al que vamos a instaurar". En cuanto a su dotación presupuestaria, indicó que contará con una inversión de algo más de tres millones de euros.

MEDIDAS EN ATENCION PRIMARIA

Montero, quien precisó que las estrategias de seguridad se dirigirán tanto al ámbito hospitalario, como de la atención primaria, señaló sobre este primer escalón sanitario y puerta de entrada del usuario al sistema sanitario que se extenderá "una solución hidroalcohólica para un correcta limpieza de las manos, tal y como ya se viene haciendo en la atención especializada".

"Con ello pretendemos reducir las infecciones nosocomiales --aquellas que se contraen en el propio ámbito hospitalario--, las cuáles representan la segunda causa de efectos adversos que se registran en la sanidad pública", sostuvo Montero.

Además, adelantó que cada centro asistencial "tendrá que tener un plan específico de seguridad", el cual tendrá "un peso específico importante en el contrato-programa" de cada centro, lo que, a su vez, "determinará el modelo de financiación".

CASUISTICA DE EFECTOS ADVERSOS

En el ámbito del sistema sanitario público andaluz, la titular del ramo detalló que la incidencia de efectos adversos ligados a la hospitalización se sitúa en el 6,93 por ciento de casos.

De este porcentaje, el mayor número de casos suele producirse durante los cuidados en la hospitalización (38,35 por ciento del total) y el procedimiento quirúrgico (33 por ciento). Asimismo, el 53 por ciento de los casos conlleva que se prolongue la estancia hospitalaria unos cuatro día de media, lo que, sólo en este capítulo, ocasiona a las arcas sanitarias andaluzas "unos 40 millones de euros anuales por el alargamiento de la estancia hospitalaria".

SOLO UNO DE CADA CUATRO EFECTOS ADVERSOS ES EVITABLE

Este dilatación de la estancia hospitalaria se debe, fundamentalmente, "a las infecciones nosocomiales que el paciente contrae en el propio ámbito hospitalario", precisó. De igual modo, sostuvo que un 39,6 por ciento de casos causa algún tipo de incapacidad y únicamente un 25,6 por ciento puede ser evitable.

"Estos indicadores sitúan a Andalucía en mejores niveles que la media internacional, que registra una tasa de efectos adversos de entre un 3 y un 16,6 por ciento de media, con unos índices de errores evitables situados entre un 40 y un 50 por ciento", aseguró.

Por último, Montero señaló que todo este conjunto de medidas, que se enmarcan en la 'Alianza por la Seguridad de los Pacientes' propugnada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), siguen las directrices fijadas tanto del Plan de Calidad del Ministerio de Sanidad y Consumo, como del II Plan de Calidad de la Consejería de Salud.

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