SEVILLA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Asociación para la Defensa del Patrimonio de Andalucía (Adepa) reclamó hoy al delegado provincial de la Consejería de Cultura en Sevilla, Bernardo Bueno, que "deje las bromas" y sancione la destrucción del patrimonio protegido, aludiendo a la fachada del siglo XVIII del número 32 de la céntrica calle O'Donnell, que fue recientemente derribada sin autorización previa por una empresa privada.
El portavoz de Adepa, Joaquín Egea, explicó a Europa Press que casos como el de la calle O'Donnell ya tienen precedentes en la ciudad de Sevilla, recordando que hace aproximadamente tres meses ya se produjo en la calle Gamazo el derribo de una casa, también del siglo XVIII, a consecuencia de un "desgraciado accidente", según ironizó Egea en cuanto a las causas alegadas por los responsables de la obra.
En ese sentido, y después de que la Consejería de Cultura anunciase que incoaría un expediente sancionador a la entidad responsable des derribo de la citada fachada de la calle O'Donnell, Egea señaló que en el caso de la calle Gamazo "también anunciaron sanciones, y desde entonces nada se sabe". En ese sentido, lamentó la destrucción de esta fachada y reclamó "sanciones públicas" para los responsables de actos de este tipo.
Al hilo, reclamó que la Delegación provincial de Cultura obligue igualmente a los autores de estos actos a reconstruir los restos patrimoniales destruidos, pues para una empresa privada la sanción impuesta por la administración pública puede ser "compensada" con las ganancias del negocio inmobiliario de la finca en cuestión.
"Todo eso es lo que Bernardo Bueno no hace", dijo Joaquín Egea en cuanto al régimen sancionador de castiga la destrucción del patrimonio arquitectónico y a la "normativa en vigor" que obliga a los autores de los derribos a restituir las edificaciones afectadas, siempre que éstas estén catalogadas y protegidas.
Adepa sostiene que, desde que se peatonalizó la calle O'Donnell, el patrimonio arquitectónico sevillano ha perdido en esta calle dos casas de valor patrimonial, una muy cerca de la calle Velázquez y otra, en el otro extremo, junto a la plaza de la Magdalena.
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