Sevilla.- Los afectados de Las Letanías no logran consumar la mudanza en el plazo estipulado al encontrar "problemas"

SEVILLA 27 May. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Damnificados Consuelo de los Afligidos, que agrupa a las quince familias afectadas por la explosión intencionada que destruyó en agosto de 2003 un bloque de Las Letanías, no logró completar hoy el traslado de todas las familias al nuevo bloque construido por la Empresa Pública del Suelo de Andalucía (EPSA), pues estos vecinos esperan aún que se libere el dinero recaudado para adquirir nuevos muebles y que el nuevo edificio sea registrado para poder formalizar las hipotecas.

El portavoz de la asociación, Angel Sánchez, informó a Europa Press de que su familia, y otras tantas del total de 15 familias afectadas por este caso, no han podido consumar la mudanza dentro del plazo estipulado por la Junta de Andalucía, pues estos vecinos esperan todavía que el Ayuntamiento libere la cuantía recaudada mediante una cuenta benéfica para la adquisición del nuevo mobiliario. "Hay una serie de problemas", dijo al respecto.

Además, señaló que los afectados que han intentado formalizar una hipoteca para afrontar el pago de 12.835 euros por sus nuevas viviendas, levantadas en el mismo lugar en el que se ubicaba el inmueble siniestrado, se han encontrado con la imposibilidad de realizar la operación porque el nuevo bloque de pisos "todavía no está registrado".

No obstante, el portavoz de la asociación consideró que estas circunstancias no tendrán efectos sobre el grupo de vecinos y advirtió de que su intención es "terminar esto cuanto antes".

En agosto de 2003, una explosión ocurrida en la calle Consuelo de los Afligidos provocó que todo un edificio tuviera que ser demolido y sus inquilinos realojados ante el temor de un derrumbe. La Consejería de Obras Públicas y Transportes, como propietaria del inmueble, se comprometió a la reconstrucción del edificio, adjudicando las obras a la empresa Conspeiper S.L., por importe de 690.000 euros.

Según las condiciones estipuladas por la Junta de Andalucía, los vecinos afectados por la citada explosión que tuvieran su vivienda en propiedad obtienen las nuevas viviendas por un valor de 12.835 euros, la diferencia resultante entre el valor del nuevo inmueble y el valor de la anterior vivienda. Mientras, las viviendas de alquiler se someten a un arrendamiento de 50,34 euros mensuales con opción de compra transcurridos diez años.