SEVILLA 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los cerca de 40 vecinos de la Intercomunidad Macarena afectados por la actividad del Centro Social Ocupado y Autogestionado Casas Viejas, ubicado en el barrio del Pumarejo de Sevilla capital, suman ya más de 30 denuncias ante la Policía Local de la ciudad hispalense a consecuencia de los "ruidos" y molestias generados por los colectivos ocupas que desarrollan actividades en el inmueble.
El presidente de la Intercomunidad Macarena, Carmelo Gallardo, informó a Europa Press de que los vecinos afectados por la ocupación de ese inmueble han formulado ya ante la Policía Local más de 30 denuncias, todas ellas relativas a los "ruidos" que genera la actividad del recinto.
En ese sentido, Gallardo negó que el Centro Social Ocupado y Autogestionado Casas Viejas haya fijado su hora de cierre a las 24.00 horas, pues la organización del centro defiende que ésta es la hora de cierre y que los conciertos y teatros se limitan a dos sábados al mes. Según el portavoz de la Intercomunidad Macarena, el recinto "cierra sobre la una de la madrugada, pero en el interior permanece la gente armando jaleo y tirando botellas".
De hecho, aseguró que algunas de las ya citadas denuncias aluden a "ruidos" más allá de "las tres o las cuatro de la mañana". Además, denunció que los colectivos de Casas Viejas "han abierto un bar al público sin control alguno". "Quién controla los mecanismos de salud de ese bar", preguntó retóricamente.
Carmelo Gallardo admitió que cuando los vecinos han contactado con los gestores del Centro Social Ocupado y Autogestionado Casas Viejas, éstos han resultado ser "gente encantadora", pero señaló que la dirección de la organización "cambia constantemente" de personas y criticó la "dejación" del Ayuntamiento de Sevilla a la hora de establecer un control sobre el recinto.
No obstante, la organización del Centro Social Ocupado y Autogestionado Casas Viejas, ha manifestado que dicho centro "presta un servicio y un espacio al barrio" y afirmó que guarda "especial cuidado" para que su actividad no moleste a los vecinos de la zona.
Los colectivos sociales del recinto aseguran contar con el apoyo del Centro Vecinal Pumarejo, la Plataforma por La Casa del Pumarejo, la Casa de la Paz, Ecologistas en Acción, la Oficina de Derechos Sociales, el colectivo Huerta del Rey Moro y la asociación de madres y padres de alumnos Altos Colegios, al tiempo que se muestran "abiertos al dialogo con los vecinos para subsanar cualquier molestia que pudieran sufrir".