SEVILLA 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un total de 3.670 escolares de Sevilla capital y provincia, Huelva, Cádiz y Almería han visitado hasta ahora la II Bienal Internacional de Arte Contemporáneo de Sevilla (Biacs2) gracias al convenio firmado entre la Fundación Biacs, la Consejería de Educación y el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC).
El objetivo de este acuerdo es que la exposición ofrezca visitas guiadas a distintos grupos y colectivos para que conozcan mejor y puedan interpretar las obras expuestas en el Monasterio de la Cartuja con motivo de la muestra.
Los colegios, públicos o privados, o cualquier centro educativo que así lo desee puede concertar una visita gratuita y acercar así a los alumnos al mundo del arte contemporáneo, señaló la organización en un comunicado remitido a Europa Press. Las visitas se adaptan al nivel de cada estudiante y no se olvida del profesorado.
Durante los pasados 30 y 31 de octubre y 2 de noviembre se hizo una presentación para los profesores de la actividad en la que se les enseñó la exposición, se les explicó el método de trabajo y se les proporcionó material didáctico. La convocatoria se hizo por niveles educativos y en esos tres días asistieron en total 325 educadores.
CRÍTICAS AL CONVENIO
Este acuerdo entre la Bienal y Educación suscitó recientemente las críticas del presidente de la Confederación de Asociaciones Católicas de Padres de Alumnos de Andalucía (Confapa), Juan María del Pino, que pidió a la organización "que respete las creencias de la mayoría de la población de esta ciudad", en referencia a la obra de Josephine Meckseper que une los conceptos de sexo y Semana Santa, ya que "una vez más, al amparo del falso ejercicio de la libertad de expresión, se ataca a los católicos".
En declaraciones a Europa Press, Del Pino consideró que "no se tiene la misma sensibilidad con los católicos que con otras religiones" y recordó "cómo se pedía respeto cuando se produjo el escándalo por las viñetas de Mahoma o por las palabras del Papa sobre el Islam".
La instalación de la alemana Josephine Meckseper, que se expone en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC), une los conceptos de sexo y Semana Santa. En concreto, la instalación consiste en una vitrina en la que se expone un crucifijo que cuelga de la entrepierna de una maniquí, vestida con lencería fina, ante un nazareno de la Amargura.
A juicio del presidente de Confapa, "no vale todo al amparo de la libertad de expresión, porque la libertad de uno termina donde empieza la de los demás". Así, consideró que una muestra "que se paga en parte con dinero público podría tener más respeto por las creencias de la mayoría de los sevillanos".
En referencia al convenio entre la Consejería de Educación y la Fundación Biacs para organizar visitas de escolares a la exposición, Del Pino dijo que "los organizadores de la Bienal deben tener en cuenta que en muchos casos los menores podrían estar viendo esa obra en contra del criterio ético y moral de sus padres".
Por ello, pidió a Educación que informe a las asociaciones de padres de los colegios de estas excursiones, para que sean los padres los que decidan si aceptan esta actividad para sus hijos.
Del Pino concluyó lamentando que "una vez más sale gratis insultar a la religión católica" y asegurando que, "aunque no somos la Inquisición del siglo XXI, la modernidad debe respetar las creencias de los demás".