SEVILLA, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un máximo de cinco personas de media a la hora utiliza las lanzaderas de Tussam de acceso al centro desde que se pusieran en marcha el pasado miércoles, según un muestreo realizado por el grupo municipal popular.
Según afirmó en rueda de prensa el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sevilla, Jaime Raynaud, "los resultados no pueden ser más desoladores", ya que resulta "una media de 1.200 personas al día, mientras que 100.000 personas se transportaban a diario hasta Plaza Nueva en autobús".
En concreto, explicó que el miércoles entre las 19.00 y las 20.00 horas hicieron el recorrido desde Almirante Lobo hasta Reyes Católicos 60 personas y el jueves de 9.45 a 10.45 horas realizaron este trayecto 55 pasajeros y de 13.00 a 14.00 horas sólo fueron 29.
Raynaud achacó estas cifras a la "improvisación y falta de información" y al coste del trayecto, que según señaló supuso una "sorpresa" para los usuarios, además de originar un "rechazo frontal".
Ante esta situación, insistió en su propuesta de establecer una red de minibuses eléctricos no contaminantes como alternativa al tráfico y señaló la necesidad de "no guardar en el cajón" la línea 2 del Metro de Sevilla.
Asimismo, alertó sobre el "gravísimo riesgo" de que "el hábito de compra en el centro histórico se derive hacia otras zonas de la ciudad perjudicando al centro" y se refirió también al perjuicio que supone la situación actual para personas con dificultades motrices.
Con respecto a la reducción de la contaminación reseñada ayer por el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, el portavoz popular respondió que "no desaparece, sino se traslada al Paseo Colón", zona en la que consideró que se hacen necesarios dos carriles para el transporte público.
Por otro lado, el grupo popular ha registrado una propuesta para solicitar la redacción "a la mayor brevedad posible" de un Plan Especial de Accesibilidad y Movilidad para el Casco Histórico en el que se definan "nítidamente" las zonas a peatonalizar, "bajo las premisas de información suficiente, medidas complementarias a implantar durante y después de las obras y calendario escalonado".
"No se puede supeditar una medida tan necesaria al capricho del alcalde de poner en marcha el tranvía antes de las próximas elecciones", criticó Raynaud, quien se pregunto "¿por qué no inició el proceso de peatonalización en el mandato anterior".
