SEVILLA 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
La organización del Centro Social Ocupado y Autogestionado Casas Viejas, ubicado en el barrio del Pumarejo de Sevilla capital, manifestó hoy públicamente junto con varias organizaciones sociales que dicho centro "presta un servicio y un espacio al barrio" y afirmó que guarda "especial cuidado" para que su actividad no moleste a los vecinos de la zona.
En un comunicado remitido a Europa Press, la organización del Centro Social Ocupado y Autogestionado Casas Viejas aseguró contar con el apoyo del Centro Vecinal Pumarejo, la Plataforma por La Casa del Pumarejo, la Casa de la Paz, Ecologistas en Acción, la Oficina de Derechos Sociales, el colectivo Huerta del Rey Moro y la asociación de madres y padres de alumnos Altos Colegios.
La organización y estos colectivos mostraron su "sorpresa" ante las "declaraciones difamatorias" vertidas por el presidente de la Asociación de Vecinos y Comerciantes de San Luís-Pumarejo, Angel Hueso, con lo que el Centro Social Ocupado y Autogestionado advirtió de que esta organización vecinal "no representa al conjunto de vecinos del barrio". "En el barrio San Luís-Pumarejo existen otras muchas asociaciones de mayor antigüedad y que apoyan la continuidad de las actividades", señaló.
Además, el colectivo de ocupas advirtió de que Casas Viejas tiene "especial cuidado" de no generar ruidos que pudieran molestar a los vecinos, pues la hora de cierre se ha fijado a las 24.00 horas y las actividades como teatro y conciertos se limitan a dos sábados cada mes. Igualmente, el grupo de ocupas se mostró "abierto al dialogo con los vecinos para subsanar cualquier molestia que pudieran sufrir". Del mismo modo, la organización del edificio ocupado negó que el inmueble se encuentre en ruinas y aseguró que se han acometido "obras de acondicionamiento" y que el estado de la construcción "ha sido supervisado por arquitectos que desmienten el presunto estado de ruina".