SEVILLA 9 May. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo Andalucista en el Ayuntamiento de Sevilla, Agustín Villar, presentó hoy la reprobación que la agrupación municipal del PA ha acordado dirigir contra el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), debido a los daños arqueológicos y medioambientales que, según el PA, éste ha llevado a cabo con motivo de las obras de implantación del tranvía ligero Metrocentro.
En el texto dirigido a la corporación municipal, al que ha tenido acceso Europa Press, el PA afirma que la situación de la ciudad "no hace más que deteriorarse día a día" por la "pésima" actuación del gobierno municipal.
Los episodios que el Grupo municipal Andalucista considera más graves tienen que ver con la tala "salvaje" de árboles llevada a cabo por el Ayuntamiento en el casco histórico y en actuaciones contra el patrimonio, en relación a los daños supuestamente provocados por la actuación municipal en los hornos almohades de los siglos XII y XIII descubiertos en las excavaciones de Emasesa en la Puerta de Jerez.
El alcalde, según Villar, comenzó la obra "sin contar, como marca la ley, con el informe medioambiental, sin Plan de Seguridad y sin las autorizaciones preceptivas de la Junta de Andalucía". El 30 de marzo, la Delegación Provincial de Cultura de la Junta en Sevilla ordenó la paralización --comunicada, según el PA, a Emasesa, la Gerencia de Urbanismo y el jefe de obra de la empresa adjudicataria-- de estas obras por la apertura, sin autorización, de un pozo "de tamaño tal que puede afectar a posibles restos arqueológicos".
El PA del Ayuntamiento hispalense expuso que no fue hasta el 3 de abril cuando Emasesa remitió a Cultura el proyecto de obras correspondiente "sin el preceptivo informe medioambiental". Asimismo, el equipo arqueológico informó de la desaparición de los hornos, y su "destrucción" provocó la apertura de expediente por parte de la Junta.
El PA, por otro lado, cifró en unos 80 los árboles talados de forma "masiva e indiscriminada" por el Ayuntamiento entre los días 29 de abril y 3 de mayo, como parte de los trabajos de la construcción del tranvía.
"Desde que en el siglo XIX, en la administración, se crearon órganos encargados de velar por el patrimonio histórico, nunca el Ayuntamiento de Sevilla había incumplido una orden de paralización de obras por posible destrucción o deterioro del patrimonio", finalizó el Grupo Andalucista.