Sevilla.- El Pleno del Ayuntamiento rechaza la propuesta del PP de volver al "modelo antiguo" de concentración juvenil

SEVILLA, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Pleno del Ayuntamiento de Sevilla decidió hoy por una mayoría de 17 votos a 16 rechazar la propuesta expuesta por el concejal del Grupo municipal Popular Beltrán Pérez de "ajustar a las normativas" de espectáculos públicos y convivencia ciudadana la celebración de 'macrobotellones' en la capital hispalense, volviendo al "modelo antiguo" de concentración juvenil.

Pérez presentó la propuesta popular explicando el "grave problema" que supone que estos eventos se organicen "sin autorización", por el "capricho" de un número indeterminado de personas "que no sabemos qué intenciones tienen". Adujo que son las autoridades pertinentes las que deben "decidir, autorizar y proteger" el lugar y el tiempo de celebración de estas concentraciones.

Asimismo, explicó que desde hace dos años se han producido 15 convocatorias no autorizadas para la ingesta de alcohol en la vía pública, que según Pérez han supuesto "dos años de condena para vecinos y trabajadores de toda Sevilla". Por ello, instó al equipo de Gobierno a "sumarse" a la propuesta del Partido Popular "por trigésimo octava vez" --en referencia a las 38 propuestas anteriores en Pleno del Grupo Popular sobre el mismo asunto--.

La propuesta hacía referencia a la vuelta al modelo antiguo de 'fiestas universitarias'; al "cumplimiento del marco jurídico contemplado en la Constitución y en las leyes estatales, autonómicas y municipales para regular la convivencia ciudadana", realizando las fiestas en espacios alejados de zonas residenciales; a una "mayor implicación" de los sectores sociales afectados por la convocatoria de estos eventos y la "exigencia" de "voluntad política" al equipo de Gobierno municipal y a la Junta para "asumir sus responsabilidades".

EL PA SE SUMO A LA PROPUESTA

El Grupo municipal Andalucista se sumó a la propuesta del PP, aunque matizó algunos aspectos de éstas. Así, la edil Marta Mejías presentó dos enmiendas, una de ellas para solicitar que se cambiara la denominación de los eventos a regular, pasando de 'fiestas universitarias' a 'concentraciones juveniles' --para no "satanizar" al colectivo universitario, según explicó Mejías--.

También se sugirió al PP añadir a la propuesta de creación de una "Comisión Permanente" representantes de los Consejos Local y Provincial de Juventud de Sevilla y del Consejo de Alumnos de la Universidad Pablo de Olavide (UPO), para unirse a los miembros del equipo de Gobierno y otras administraciones, representantes de vecinos y comerciantes, Universidad de Sevilla y Cadus, Policía Local y Nacional y Defensor del Pueblo. Amabas enmiendas fueron aceptadas por el Grupo Popular.

Por su parte, el concejal de Juventud y Deportes del Consistorio hispalense, Francisco Manuel Silva (IU), adujo que el Ayuntamiento "entiende la nueva problemática y asume las responsabilidades" de esta nueva forma de ocio "no dependiente de la oferta". No obstante, incidió en que el Gobierno municipal "no puede prohibir beber en la calle, porque no cuenta con instrumentos legales para ello", e instó al PP a "no convertir un asunto que concierne a 30.000 jóvenes en riesgo y a 60.000 padres preocupados en un mitin político".

En representación del Grupo Socialista, el concejal de Gobernación, Francisco Fernández, explicó que el 'botellón' es "una forma de ocio que no comparto pero que se está dando en muchas ciudades". Apostó por una actuación "preventiva" y negó la posibilidad de una intervención "violenta" porque "en muchos casos supondría acometer una actuación contra familiares de gente cabal".

Tras la votación, el portavoz del Grupo Popular, Jaime Raynaud, criticó la "oportunidad perdida" por parte del PSOE de "convertir las palabras en hechos reales". Según el portavoz, la propuesta popular incluía una celebración de la fiesta, pero "cumpliendo la normativa, con un diálogo consensuado", y dijo que el alcalde de la ciudad, Alfredo Sánchez Monteseirín, tendrá "difícil" justificar la decisión ante la opinión pública.

VECINOS DICEN QUE SE ATENTA CONTRA LOS DERECHOS CONSTITUCIONALES

Posteriormente, la portavoz de la plataforma ciudadana 'Por el Derecho al Descanso', Dolores Dávila, hizo una comparecencia en el Pleno en relación con este mismo asunto, recalcando que el efecto directo de los 'macrobotellones' es "impedir a los vecinos el libre ejercicio de sus derechos constitucionales", que deben salvaguardar los poderes públicos.

Dávila recordó las declaraciones de la consejera de Gobernación de la Junta, Evangelina Naranjo, que aducía que los ayuntamientos tienen potestad para evitar estos problemas, así como las del alcalde de Sevilla, en relación a que no puede hacer nada para evitar los 'macrobotellones', para concluir que "o la consejera falta a la verdad o es que el alcalde no es capaz de evitar estos problemas".

"Sabemos de su interés por los sevillanos y asumimos que como médico estará especialmente al tanto de los graves problemas de salud que se producen al beber en un botellón, por lo que como padres y vecinos pedimos ayuda para poner fin a este despropósito", expuso la portavoz vecinal, que reprochó al primer edil hispalense que, pese a las "numerosas" cartas remitidas a su persona, aún no ha contestado ni recibido a la plataforma.