Sevilla.-Sucesos.- Intervenidas 1.000 ampollas de hormonas del crecimiento que llegaron de China irregularmente

Europa Press Andalucía
Actualizado: jueves, 4 mayo 2006 15:28

SEVILLA 4 May. (EUROPA PRESS) - La Guardia Civil, en un operativo llevado a cabo en colaboración con agentes de Aduanas en Sevilla, han intervenido 1.000 ampollas de hormonas del crecimiento que llegaron de forma irregular a la capital hispalense procedentes de China.

Según informó el Instituto Armado en un comunicado remitido a Europa Press, en el operativo la Guardia Civil ha detenido a cinco personas, a las que se les ha instruido diligencias por un supuesto delito contra la salud pública. Los arrestados, todos ellos varones, son de las provincias de Jaén y Granada.

La actuación de la Guardia Civil se inició al detectarse el envío de varios paquetes que resultan sospechosos en el aeropuerto de Sevilla, tratándose de medicamentos que no habían llegado por medio de los cauces legales. Se trataba de cajas de ampollas inyectables de dos marcas de hormonas y que eran consideradas como género prohibido, por lo que fueron remitidas a las autoridades competentes para su análisis.

Así las cosas, los agentes conocieron que este tipo de productos sólo pueden llegar a España contando con la consiguiente autorización de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, circunstancia que no ocurría en estas importaciones.

Este tipo de mercancía, según se desprende de las primeras investigaciones, se consigue a través de Internet. Luego, el importador, ubicado en China, manda los medicamentos por paquetería a Sevilla, donde son recogidos. Respecto los importadores, son falsos. Es decir, no se sabe quiénes son y donde están ubicados, con la dificultad derivada de estas circunstancias a efectos de responsabilidades penales y administrativas.

Asimismo, se conoció que los destinatarios de estos medicamentos podrían ser dentro de un círculo de gimnasios de musculación ubicados en Andalucía.

Respecto el riesgo en el consumo de estos productos, independientemente de que se comercializan fuera del circuito legal de distribución oficial, uno de los peligros estriba en la falta de conservación. Estas hormonas tienen que conservarse entre 2 y 4 grados, circunstancia que no se cumple al ser enviadas en paquetería común desde China vía Bruselas.

Contenido patrocinado