Sevilla.-Tribunales.- Juzgan mañana a un policía local de Utrera acusado de agredir a un motorista que eludió un control

Actualizado: martes, 2 mayo 2006 19:01

SEVILLA, 2 May. (EUROPA PRESS) -

La Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Sevilla juzgará mañana a un policía local de Utrera (Sevilla) acusado de excederse y agredir a un motorista que eludió un control policial.

Según consta en el escrito de acusación del ministerio fiscal, al que tuvo acceso Europa Press, los hechos se produjeron sobre las 00.30 horas del 14 de junio de 2003, cuando el denunciante, J.C.S.B., circulaba con su ciclomotor por la avenida San Juan Bosco de la citada localidad sevillana y observó un control policial y, como no llevaba toda la documentación en regla, trató de evitar la actuación de los agentes, no parándose a las indicaciones de los mismos.

Ante ello, el policía procesado, S.G.C., persiguió con su motocicleta al denunciante, alcanzándole finalmente, momento en el que le agarró por un brazo y el cuello, tirando de él hasta hacerle caer al suelo. Y, como el motorista le recriminó su conducta, siempre según el fiscal, el acusado, sin causa alguna que lo justificara, excediéndose en sus funciones, le golpeó repetidamente con la porra que llevaba en la cabeza, el ojo izquierdo, cara y mandíbula, trasladándole después a la Jefatura de la Policía Local, donde el acusado volvió a agredir supuestamente a la víctima, a la que propinó varios guantazos en la cara.

Como consecuencia de lo ocurrido, el denunciante sufrió un hematoma en el pómulo izquierdo y una herida inciso-contusa en el cuero cabelludo, por lo que precisó puntos de sutura, tardando en sanar 12 días sin impedimento para el desarrollo de sus ocupaciones habituales. Como secuelas le quedaron una cicatriz cubierta por el pelo, dolor de cabeza y trastornos del sueño.

Para el fiscal, los hechos son constitutivos de un delito de lesiones por el que pide dos años y medio de prisión, con la accesoria de suspensión de empleo o cargo público durante el tiempo de la condena. También pide 900 euros de indemnización por las lesiones y secuelas producidas, cantidad de que la estima que el Ayuntamiento de Utrera es el responsable civil subsidiario.

Por su parte, la acusación particular, se muestra conforme con lo expuesto por el fiscal, si bien puntualiza que en ningún momento se le dio el alto pues eludió el control antes de llegar al mismo y "al verlo el agente hoy acusado salió detrás de él y, hasta el momento en que llegó a su altura, desconocía que lo seguían y que los agentes se habían dado cuenta de su conducta".

También agregó que, en la Jefatura, su defendido "no fue solamente agredido otra vez por el acusado, sino que varios de los policías allí presentes lo intimidaron y asustaron.

POSTURA DE LA DEFENSA

En cuanto a la defensa del policía inculpado, muestra en su escrito su "absoluta disconformidad" con lo narrado por las otras dos partes, señalando que su relato de los hechos es "manifiestamente incompleto e inexacto y contiene hechos absolutamente inciertos que incluso se contradicen con las declaraciones realizadas por el denunciante ante la Guardia Civil y el Juzgado de Instrucción número 3 de Utrera".

Así, defiende que su defendido, el policía procesado, observó como en dirección al control se acercaba un ciclomotor con escape libre y cuyo conductor iba sin casco y que se desvió, para evitar el control, en dirección prohibida, por el 'Callejón de la Fruta', ante lo que el agente persiguió al ciclomotor con su moto oficial "con las señales acústicas y luminosas activadas", con intención de darle el alto, identificarlo y denunciarlo si procedía.

Pese a ello, siempre según la defensa, el denunciante no detuvo su marcha, respondiendo que "me pararé si yo quiero", teniendo el agente que cruzarse delante del denunciante con su vehículo, obligándole así a detener su marcha. Entonces, le requirió la documentación del ciclomotor, respondiendo su conductor que no se la daba "porque no le daba la gana, que era una vergüenza para el Cuerpo y que se iba", intentando arrancar la moto, ante lo que el policía intentó evitarlo mientras pedía refuerzos.

Ante la situación, el denunciante --añadió la defensa-- "reaccionó violentamente, arremetiendo" contra el agente, llegando a darle un cabezazo en la nariz, causándole diversas lesiones. Reconoció que el policía le dio con su porra porque el motorista quiso agredirle de nuevo, y que lo agarró del cuello, iniciándose un forcejeo, hasta la llegada de los refuerzos. Además, negó que las agresiones continuaran en Jefatura porque el inculpado llegó más tarde a estas dependencias, tras curarse de sus lesiones, no volviendo a coincidir con el motorista.

Tras defender que obró en legítima defensa y en cumplimiento de su deber, pidió la libre absolución del policía local, señalando que "tampoco corresponde indemnización alguna, y menos aún la desproporcionada y exagerada cuantía propuesta por la acusación, entendiendo que, en todo caso, debía limitarse a la reparación de los daños apreciados por el forense, que se reduce a los 12 días no impeditivos, que ascendería en todo caso a 288,48 euros" --en base a una cuota diaria de 24,04 euros--.