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OVIEDO, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, se refirió hoy a la ley promovida por el PP y apoyada por IU para integrar el Hospital de Arriondas y su personal en el Servicio de Salud del Principado, Sespa, y dijo que confía en que todavía haya una oportunidad para encontrar soluciones antes de que "culmine en una situación donde verdaderamente estarían abocados a declarar una inconstitucionalidad, que parece evidente a juzgar por los informes de los letrados y de los jurídicos que, desde diversos ámbitos del Gobierno, lo han manifestado".
Areces indicó, en declaraciones a los periodistas, que el "tema" de Arriondas es "preocupante, muy preocupante desde diversos ámbitos" e insistió en que se han vulnerado los derechos del Gobierno.
Para el presidente asturiano, además del procedimiento seguido que consideran lamentable por la manera en que se ha producido, lo que sí está claro es que "hay un problema que va a afectar al sistema sanitario asturiano y particularmente a los trabajadores que en la expectativa que abre esa Ley van a tener un grado de incertidumbre inequívoco sobre su situación laboral".
Insistió en que la Ley, tal y como se plantea, claramente cuenta con elementos de inconstitucionalidad, que afectan a la vulneración del reglamento, que no ha permitido que el Gobierno hiciese unas manifestaciones fundadas, según la calificación de los letrados.
"Pero es que el problema subsiguiente, cuando se desarrolle la Ley, va a ser que van a pretender que un conjunto de trabajadores, sin ninguna prueba selectiva, pues trate de acceder a un status de empleados públicos, partiendo de una base errónea que es considerar que hay una sucesión de empresa cuando ese término afecta fundamentalmente a otros ámbitos pero no al acceso a la función pública", dijo Areces.
Por ello auguró que el conflicto desembocará en un litigio que puede traer consecuencias "muy graves e irreparables para la estabilidad de los trabajadores". Así, añadió que de seguir en esta senda se puede dar un problema considerable que afecte al propio hospital.
"Espero que la sensatez a lo largo de ese desarrollo se imponga, se trate de encontrar alguna solución que sea razonable y que, desde luego, vuelva todo a la normalidad que debería de haber tenido este procedimiento y que a nuestro juicio ha entrado en una senda muy compleja y muy difícil"
No obstante Areces indicó que espera que esa discrepancia se desarrolle "de modo que no afecte a esa estabilidad". "Creo que hay todavía oportunidad para encontrar soluciones antes de que culmine en una situación donde verdaderamente estaríamos abocados a declarar una inconstitucionalidad, que parece evidente a juzgar por los informes de los letrados y de los jurídicos que, desde diversos ámbitos del Gobierno, nos lo han manifestado", concluyó Areces.
