Santander, Barcelona y Vitoria quieren ser las "ciudades más inteligentes de Europa"

Acto Ciudades Inteligentes
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 21 febrero 2012 19:17

Subrayan que así se conseguirá el doble objetivo de ahorrar costes en la gestión municipal y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos

SANTANDER, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

Santander, Barcelona y Vitoria han abogado este martes por trabajar "estrechamente", "aprender unas de otras" y "compartir experiencias" para lograr convertirse en las "ciudades más inteligentes" de Europa" aprovechando las "oportunidades" que ofrecen las nuevas tecnologías para conseguir el "doble objetivo" de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y ahorrar costes en la gestión municipal.

Así lo han asegurado los alcaldes de estas tres ciudades, Íñigo de la Serna (PP), Xavier Trias (CIU) y Javier Maroto (PP), respectivamente, quienes --durante su participación en el foro de El Diario Montañés en el Hotel Chiqui, que en esta edición, ha versado sobre las ciudades inteligentes-- han subrayado la importancia de la constitución de la Red de Ciudades Inteligentes, en la que actualmente están integradas una veintena de ciudades, para compartir conocimientos y colaborar en este ámbito.

Su presidente, el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, ha opinado que el trabajo en "red es fundamental" ya que, a su juicio, la actual manera de proceder "no es sostenible" y las ciudades deben de transformar la forma de desarrollar sus servicios.

Entre los "pasos importantes" que, a su juicio, hay que dar en este ámbito, De la Serna ha incluido el establecimiento de "herramientas de interoperatividad y estandarización" que permitan a las ciudades "compartir conocimientos" y aplicaciones para que, si un ayuntamiento "gasta un dinero en desarrollar una aplicación, no se lo gaste el otro" en lo mismo.

Además, la Red de Ciudades Inteligentes, constituida el pasado enero, debe convertirse, en su opinión, en un "interlocutor válido" para actuar de forma "global" a la hora de poner en marcha proyectos junto al sector público.

En este sentido, ha abogado por constituir un marco jurídico estable que "dé seguridad jurídica" a las "nuevas fórmulas de relación" que existen entre el sector público y privado a la hora de abordar de forma conjunta este tipo de proyectos, un tipo de colaboración que los tres alcaldes han defendido, sobre todo en los actuales momentos de crisis económica.

El regidor santanderino se ha mostrado "absolutamente convencido" de que que, si ahora se hacen las cosas bien, aprovechando con "trabajo" y "rapidez" las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías para mejorar la calidad de vida en la ciudad y ahorrar costes, se logrará salir "fortalecido" de la actual situación de crisis.

Según ha explicado, y aunque "no hay una definición" concreta sobre lo que supone ser una ciudad inteligente, lo que se pretende es hacer un "uso intensivo de la tecnología" para hacer "ciudades sostenibles y cada vez más eficientes".

En esta tarea, ha aclarado que se deben de sumar no sólo las empresas de corte tecnológico, sino de también las del sector tradicional pues -ha dicho-- la "nueva economía" y el "cambio productivo" no se refiere sólo a las empresas tecnologicas, sino a todos aquellos agentes que dirijan su actividad "de manera innovadora".

OBJETIVOS Y LÍNEAS DE TRABAJO

Según ha explicado, entre los objetivos que se deben de cumplir para avanzar en el proyecto de ciudades inteligentes será llevar a cabo una aprovechamiento cada vez mayor de los conocimientos que ya tienen las empresas para mejorar los servicios públicos; aprovechar los beneficios que ofrecen para generar actividad económica, riqueza y empleo para las ciudades; Y conseguir optimizar los recursos y ahorrar costes a la vez que se mejora la calidad de vida de los ciudadanos ofreciendo nuevos y mejores servicios.

De la Serna se ha referido en su intervención a las "líneas de trabajo" que se deberán de seguir en los próximos años para avanzar en este campo, entre las que ha subrayado la necesidad de generar las "condiciones de contorno más favorables" para que el sector empresarial puedan trabajar en las mejores condiciones; de desarrollar nuevos proyectos, como los actuales de Smart Santander o Outsmart, que vayan consolidando ese modelo de ciudad, la internalización y el trabajo en red.

UNA CIUDAD INTELIGENTE Y VERDE

La intervención del regidor santanderino ha venido precedida de la del vicepresidente de la Red de Ciudades Inteligentes, el alcalde de Vitoria, quien ha incidido en las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías para hacer a las ciudades más "verdes".

Según ha opinado, esta es una manera más de avanzar hacia "ciudades inteligentes" y una línea que -ha explicado-- esta explotando su ciudad, Vitoria, por la que ha sido nombrada Capital Verde Europea.

Aunque ha señalado que esta designación como Capital Verde Europea no llevaba aparejada ninguna retribución económica, ha asegurado que ha servido a la ciudad, además de para atraer turismo y servir como reclamo, para conseguir más de 52 millones de euros de financiación público privada para llevar a cabo proyectos revolucionarios para mejorar la gestión medioambiental en la ciudad en ámbitos como la recogida de residuos o el urbanismo.

Por su parte, el alcalde de Barcelona ha incidido en su intervención en el concepto de "urbanismo inteligente", en el que las nuevas tecnologías consigan hacerlo "más sostenible" y ponerlo al servicio de las personas.

URBANISMO INTELIGENTE

Ha citado algunos de los proyectos concretos que se están desarrollando en este ámbito en Barcelona, entre los que ha citado la creación en la ciudad condal de dos manzanas de viviendas autosuficientes que gestionen por sí mismas toda la energía que necesitan y que cuenten con sistemas de reciclaje y calefacción que no creen contaminación.

También se ha referido a la implantación paulatina de infraestructuras para la circulación de vehículos eléctricos; la aplicación de nuevas tecnologías de iluminación que permitirán ahorrar hasta el 80 por ciento de la energía que consume; la creación de un 'smartcampus' o la puesta en funcionamiento de una aplicación móvil para invidentes que les ayude a mejorar su circulación por la ciudad gracias a la geolocalización del mobiliario urbano.