TOLEDO, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
Más de 3.500 alumnos de Primaria y Secundaria Obligatoria de 151 municipios de Castilla-La Mancha participarán durante los meses de julio y agosto en los programas de extensión de la atención educativa promovidos por la Consejería de Educación, Ciencia y Cultura en colaboración con el Ministerio de Educación y los ayuntamientos.
El viceconsejero de Educación y Cultura, Pedro Pablo Novillo, acompañado por el director general de Participación e Igualdad, Carlos Ayala, ha informado de esta iniciativa que se pone en marcha por segundo año consecutivo, tras el éxito cosechado el pasado verano, según ha informado la Junta en nota de prensa.
Los objetivos de estos programas son fomentar el éxito educativo mediante la extensión de la atención educativa al alumnado fuera de la jornada escolar o del calendario escolar; reforzar las competencias básicas de los estudiantes, especialmente de aquellos que muestran mayores dificultades en los aprendizajes; y superar el desfase del alumnado con incorporación tardía al sistema educativo.
Según ha explicado Novillo, "no son meramente la reproducción de las clases sino actividades dirigidas a mejorar su éxito escolar y su competencia general en las áreas donde los resultados son menos satisfactorios".
Los programas de extensión de la atención educativa se suman a las actividades de refuerzo y apoyo que se realizan durante el curso escolar, en las que el Gobierno del presidente Barreda invierte en total cerca de 1 millón de euros.
Estas actuaciones se incluyen además en el Plan para la Reducción del Abandono Escolar Temprano, aprobado con los firmantes del Pacto por Castilla-La Mancha y que se lleva a cabo en colaboración con la Consejería de Empleo, Igualdad y Juventud "porque sirve para prevenir el abandono, ofrecer nuevas oportunidades y ayudar a conseguir el éxito escolar".
NOVEDAD EN LOS PROGRAMAS
Como novedad en los programas para el verano, este año hay siete municipios que organizarán actividades dirigidas a preparar al alumnado para la prueba de acceso a ciclos formativos y para la prueba para la obtención del título de graduado en Educación Secundaria Obligatoria.
Novillo ha indicado que para poder participar en los programas de extensión deben solicitarlo los propios ayuntamientos con el acuerdo de los centros educativos de la localidad y la participación de las familias y el profesorado. "Son, por tanto, actividades con un pleno sentido educativo".
La Consejería ha atendido el 93 por ciento de las solicitudes presentadas que, por otra parte, han duplicado las del año pasado, lo que evidencia la alta valoración que han tenido los programas.
Así, en el verano de 2009 solicitaron participar 125 ayuntamientos, de los que se seleccionaron 72, y se destinaron 415.000 euros. Este curso han sido 160 los solicitantes y 151 los seleccionados, con una inversión superior a los 460.000 euros. Una gran parte corresponden a pequeños municipios de zonas rurales.
Las acciones formativas tienen un carácter innovador y se realizan a través de actuaciones como estrategias de apoyo individualizado, aulas de estudio que sirvan para la preparación y planificación de las tareas o del refuerzo educativo, además de las iniciativas de educación no formal que servirán para complementar las actividades escolares.
Van dirigidas al alumnado matriculado en enseñanza obligatoria en los centros públicos, especialmente al que presenta desfase, tiene áreas o materias no superadas o manifiesta dificultades para incorporarse al currículo ordinario, aunque están abiertas también a los alumnos con un aprendizaje normalizado.
Las clases son de lunes a viernes con una duración de 5 a 10 horas semanales. Los monitores son personas contratadas por los ayuntamientos, todos con titulación universitaria y en su mayoría maestros. Uno de los requisitos para la contratación este año es que estuvieran en situación de desempleo.
