Se comprueban si los motivos del viaje están entre las excepciones del Real Decreto del estado de alarma y el acuerdo de la Junta
VALLADOLID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
Castilla y León se ha cerrado perimetralmente este viernes y para controlar el tránsito de personas se ha establecido vigilancia en estaciones de autobús y tren de las capitales y 70 controles de la Guardia Civil tanto en autovías como en carreteras convencionales.
Así lo ha explicado el delegado del Gobierno en Castilla y León, Javier Izquierdo, quien ha añadido que estos controles se intensifican a lo largo de estos días con motivo del puente de Todos los Santos.
Ante el cierre perimetral acordado por el presidente de la Junta de Castilla y León y que se mantendrá vigente por ahora hasta el próximo 9 de noviembre, la Delegación del Gobierno pone en marcha dos tipos de actuaciones fundamentalmente para vigilar el tránsito de personas en los territorios limítrofes con otras comunidades.
Por un lado, en el caso del transporte público se controlan las estaciones de autobús y ferrocarril de las capitales de provincia, donde mayor número de viajes tienen destino a otros territorios.
Para ello, se han desplegado agentes de la Policía Nacional, tanto uniformados como de paisano, que controlan que los motivos del viaje si llegan a Castilla y León están justificado por las excepciones que establecen el Real Decreto del estado de alarma y el acuerdo del presidente de la Junta o, si se trata de recorridos de tránsito hacia otros territorios limítrofes, también motivarse dadas las restricciones establecidas también en el entorno.
Estas comprobaciones también se realizan en los desplazamientos por carretera, que deberán estar motivados y justificarse en caso de ser necesario tanto en la comunidad de origen como la de salida en caso de que en ambas se haya restringido la movilidad.