Las fugas de las redes de abastecimiento provocan en la Comunitat una pérdida del 21 por ciento del total de agua suministrada
VALENCIA, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas) está investigando el desarrollo de nuevos materiales plásticos y la tecnología óptima para asegurar la calidad del agua transportada por tuberías plásticas y garantizar la seguridad para el consumidor, según ha informado este jueves la entidad tecnológica en un comunicado.
Según la responsable de la línea de Construcción de Aimplas, Beatriz Fullana, el objetivo es "demostrar que las conducciones de las redes de abastecimiento no alteran las propiedades organolépticas del agua (olor, color, sabor) por migración de sustancias y garantizar el comportamiento idóneo durante toda su vida útil".
Aimplas ha presentado sus últimas aportaciones a este respecto en una jornada celebrada esta mañana, junto a Aguas de Valencia y la Asociación Española de Fabricantes de Tubos y Accesorios Plásticos (Asetub) para dar a conocer las últimas soluciones en redes de abastecimiento y saneamiento.
Más de 150 profesionales se han dado cita en esta jornada, celebrada en el Parque Tecnológico de Paterna, con el objetivo de conocer las ventajas de las tuberías plásticas y aspectos tan relevantes como la caracterización de los materiales, la calidad del agua, la sostenibilidad de los sistemas, el diseño y la adecuada instalación, así como las garantías que ofrece la cualificación del instalador para asegurar la idoneidad de las conducciones y el consiguiente beneficio para el consumidor y para el medio ambiente.
"La pérdida de agua es una de los principales problemas ecológicos y económicos que plantean las redes de suministro actuales. La antigüedad de las canalizaciones y la elevada presión de la red son factores que provocan roturas parciales difíciles de localizar en las tuberías", ha explicado Beatriz Fullana.
Según los últimos datos del INE, en España se suministraron a las redes públicas de abastecimiento urbano 4.941 hectómetros cúbicos (hm3) de agua. De esta cifra, se estima que las fugas, roturas y averías en las tuberías provocaron pérdidas de 820 hm3, es decir, el 16,6 por ciento del total de agua suministrada a dichas redes.
La Comunitat Valenciana es, junto a Madrid y Baleares, la única comunidad autónoma que en el último ejercicio ha reducido sus pérdidas de agua por el estado del suministro, pérdidas que se sitúan en un 21 por ciento del total de agua suministrada.
Otro de los retos ecológicos en los que se está trabajando es en minimizar el impacto medioambiental de las tuberías de las redes. "El tubo no debe ceder al medio ambiente sustancias perjudiciales. Para mejorar este aspecto buscamos innovadoras soluciones tecnológicas que aumenten las propiedades de las tuberías y garantizamos que las tuberías que se van a instalar cumplen con la normativa", ha señalado Fullana.
VENTAJAS DE LAS TUBERÍAS DE PLÁSTICO
En España se fabrican anualmente más de 560.000 toneladas de tuberías de plástico. Debido a su resistencia química son la solución idónea en ambientes altamente corrosivos, como sucede en las plantas desaladoras, ya que contribuyen a la conversión de agua salada en agua dulce.
Para Fullana, "la alta capacidad hidráulica de las tuberías de plástico permite el transporte de grandes volúmenes de agua. Para un mismo diámetro, la tubería plástica es capaz de conducir un mayor volumen de agua que otros materiales".
Por otro lado, ha destacado el bajo coeficiente de fricción de los plásticos, que permite unas menores pérdidas de presión, ventaja especialmente importante en las conducciones para largas distancias. La larga vida de las tuberías de plástico implica también reducciones de costes en material, mano de obra, instalación y mantenimiento, generando un ahorro considerable de recursos, contribuyendo a la sostenibilidad.
Además, según datos de Asetub, el ahorro de energía de la tubería plástica para agua potable en todo su ciclo de vida, con respecto a la de materiales tradicionales, es de un 32 por ciento.
En el caso de tuberías plásticas para gas, el ahorro alcanza el 70 por ciento y en el caso de tuberías plásticas para saneamiento el 14 por ciento. Las emisiones de gases de efecto invernadero se reducen un 61 por ciento de media para todas las aplicaciones, cuando las tuberías son plásticas.
