SEVILLA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
El jugador del Cajasol Iñaki De Miguel admitió "la mala situación que atraviesa el equipo", clasificado en decimoquinto lugar en la Liga ACB, donde el último fin de semana "en un mal partido" los sevillanos cosecharon una derrota, que les hace "estar mentalizados" de cara a los próximos compromisos.
El jugador, el más veterano de la plantilla hispalense, comentó que "desde la experiencia de los años" la situación "se puede enderezar", ya que "lo importante no es cómo se empieza, sino cómo terminas".
"La situación en estos momentos es delicada, tras el inicio de competición que estamos teniendo", pero para el jugador "lo más importante es estar mentalizado y escarmentados para ir hacia arriba y salir de los puestos peligrosos".
El pívot, ex del Unicaja de Málaga, asegura que "no se puede bajar los brazos bajo ningún concepto". Y eso a pesar de encajar "una dolorosa derrota" en la última jornada de Liga, cuando los sevillanos cayeron (102-80) en Menorca.
"Está claro que hicimos un mal partido ante el Vive Menorca, pero ahora no podemos mirar atrás, tenemos que pensar en el siguiente partido", añadió el ex internacional, quien es "optimista" en las posibilidades que tiene el equipo para salir de la zona peligrosa de la clasificación.
"He sufrido otras situaciones mucho peores y sé que con trabajo y compromiso se sale. No tengo ninguna duda de que vamos a salir, porque la liga no ha hecho más que comenzar. Llevamos ocho partidos (2 victorias por 8 triunfos) y sabemos que debemos espabilar", añadió.
De Miguel apuesta "por buscar soluciones para ganar partidos" y "no escudarse en las circunstancias de la pretemporada y las lesiones". Para ello, el jugador cree que el remedio lo tienen "los jugadores, técnicos, club y afición".
Esta última es "vital", "la necesitamos", apuntó el jugador, quien espera que el próximo domingo ante el AXA Barcelona "el público apoye al equipo". "Sabemos que estarán defraudados por el rendimiento del equipo hasta ahora, pero lo vamos a solucionar", aseveró.
