¿Por qué el Atlético de Madrid gana cuando no juega bien y el Real Madrid no?

Antoine Griezmann celebra uno de sus goles
ALY SONG / REUTERS
Actualizado: lunes, 14 diciembre 2015 12:00

MADRID, 14 DE DICIEMBRE (EDIZIONES)

   En la última jornada de liga vimos dos hechos curiosos. El Atlético de Madrid jugó contra el Athletic de Bilbao en el Estadio Vicente Calderón. Los del Cholo Simeone vieron cómo el rival jugó mejor que ellos, y hasta se adelantó en el encuentro. Un gol justo antes del descanso, dio alas al equipo madrileño. Y en la segunda parte, a pesar de que los vizcaínos seguían siendo mejores y jugaron mejor al fútbol, el Atlético de Madrid se hizo con los tres puntos gracias a un gol de Griezmann. El Athletic no mereció perder. Es más, mereció la victoria. Pero se la llevó el Cholo.

   El Real Madrid saltó al césped de El Madrigal sabiendo del empate del Barcelona y de la victoria del Atlético de Madrid. Era el momento para recortar puntos al líder y ponerse a 2. Saltó al campo el equipo blanco con poca motivación y ante un rival extramotivado. El Villarreal se adelantó en el marcador, y el conjunto merengue no dio muestras de recuperación. Aunque en la segunda parte mejoró un poco, no fue capaz de batir al Villarreal. Derrota del Madrid al finalizar el partido. No solo no se acerca al liderato, sino que aumenta la distancia. Mal partido del Madrid. ¿Pero por qué uno gana haciendo un mal partido y el otro pierde?

   1.- MOTIVACIÓN

   Los pupilos del Cholo Simeone salieron motivados al encuentro. No desplegaron su mejor fútbol, pero eran conscientes del pinchazo del Barcelona y de la oportunidad que esto suponía para luchar por la liga. Una ocasión que no se podía desperdiciar. Y no lo hicieron. El Athletic hizo buen fútbol, pero los madrileños tiraron de ganas de ganar, de corazón. Así consiguieron el empate. Así, el gol de la victoria. Por ganas, por estar motivados. Por estar concentrados y a lo que se tiene que estar. No consiguieron hacer el fútbol que les hubiera gustado, pero no por ello dejaron de luchar.

   En cambio, el Real Madrid pareció como que el que fuera líder de la competición fuera él. Se vio a un Madrid mediocre en el campo. El Villarreal se merendó al conjunto de Concha Espina. Salió a por todas, como si el que cazara al líder con la victoria fuera él. En cambio, los blancos parecían perdidos en el campo, desganados.

   2.- INTENSIDAD

   Es algo que nunca les falta a los del Cholo Simeone, la intensidad en el juego de todos y cada uno de los miembros de su plantilla. Es cierto que hay días que el fútbol no siempre sale bien. Hay días en que el jugador no está inspirado y su fútbol no es el mejor. Pero la intensidad no depende de si te has levantado o no con el pie izquierdo. Depende de cada uno en cada momento. Y los rojiblancos demuestran esto día a día. Siempre encima del jugador contrario, siempre cerrados, siempre jugando como bloque. Siempre dentro del partido.

   En cambio, el Real Madrid parecíó desconectado durante el encuentro. Dejando jugar al contrario y con 30 metros entre el centro del campo y el ataque. Jugadores parados esperando a que les llegara el balón. Defendiendo poco y mal. Perdiendo balones... Poca intensidad, y poca motivación por sacar adelante un parido que le ponía de nuevo en liza para ganar la liga.

   3.- ACIERTO

   Es una obviedad, pero es así. El Atlético de Madrid tuvo más acierto en su encuentro que el Real Madrid en el suyo. Griezmann tuvo el gol. Cristiano Ronaldo, no. Es sencillo. Hay veces que no funciona nada en tu equipo, pero una ocasión aislada puede hacerte ganar un partido. El Atlético de Madrid tuvo algo parecido. Y ganó. El Real Madrid acabó perdiendo el encuentro. Ni siquiera la eficacia de sus delanteros estuvo presente en el encuentro. Y si esto es así, es difícil ganar un encuentro, que, además, se te ha puesto cuesta arriba.

Leer más acerca de: