Economía/Empresas.- Sacyr Vallehermoso negocia con el Gobierno de Macao (China) la construcción de una desaladora

SHANGHAI (CHINA), 21 (De la enviada especial de EUROPA PRESS, Amalia Arauzo)

Sacyr Vallehermoso está en negociaciones con el gobierno de Macao (provincia autónoma de China) para la construcción y explotación de una planta desaladora en la que la empresa podría invertir cerca de 150 millones de dólares (unos 123,9 millones euros).

Así lo aseguró hoy a un grupo de periodistas el vicepresidente y consejero delegado de la compañía, Manuel Manrique, poco antes de participar en uno de los comités sectoriales del III Foro España-China, inaugurado esta mañana en Shanghai por el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.

A través de una de sus filiales, Sacyr Vallehermoso está presente en Macao, antigua colonia portuguesa, desde el año 1987. En esta provincia china, cuyo régimen de gobierno no depende de Pekín, la compañía posee una planta incineradora, una depuradora y una empresa de servicios.

Ahora, Sacyr quiere construir una desaladora y, si la experiencia funciona, "exportar" en los próximos tres años alguno de sus negocios a otras áreas de China, empezando por el sur y quizá por Hong-Kong, también provincia autónoma del país asiático.

CHINA, UN MERCADO POR EXPLOTAR.

Sacyr es una de las pocas grandes empresas españolas que han dado el salto a China. Sólo unas 300 compañías españolas tienen intereses en el 'gigante asiático', la mayoría pequeñas y medianas empresas en régimen de sociedades mixtas. Nutrexpa, en el campo de la alimentación, el Banco Sabadell en el de los servicios o el Grupo Antolín en la rama de automoción, son algunos ejemplos más de inversiones españolas en el país.

El último 'desembarco' lo ha llevado a cabo el despacho de abogados Garrigues, que ayer mismo inauguró en Shanghai su primera oficina asiática, cuyo objetivo será precisamente el de ayudar y asesorar a las empresas españolas que quieran invertir en China.

Según un informe de la Oficina Económica y Comercial de España en Shanghai, entre los principales sectores que constituyen una buena oportunidad para las empresas españolas se encuentran el agroalimentario, los bienes industriales y de consumo, los componentes de automoción, el medioambiente, la arquitectura, el turismo y la enseñanza del español.