MADRID, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) incluirán una enmienda que permite desatascar la ejecución del denominado Plan Renove de autovías, que en su primera fase supone modernizar 1.137 kilómetros de las vías más antiguas con una inversión inicialmente estimada en unos 5.550 millones de euros.
Este programa, que se prevé genere unos 14.000 puestos de trabajo, se financiará mediante 'peaje en la sombra', sistema por el que el Estado paga un canon anual a las empresas que reforman y mantienen la vía, que queda así libre de peaje para el usuario.
Así lo anunció hoy el ministro de Fomento, José Blanco, durante su intervención en el debate de los Presupuestos en el Pleno del Congreso, donde agradeció a los grupos parlamentarios del PP y CiU su apoyo a la enmienda que permite resolver los problemas que este plan.
"Gracias al acuerdo de gran mayoría de la cámara, los Presupuestos incluirán una enmienda con las medidas que solucionarán los problemas que presentaba la ejecución de contratos de mejora de las autovías más antiguas, como son la concesión de un préstamo participativo de 250 millones de euros de 2010 para financiar obras adicionales y necesarias de estas autovías, para convertirlas en más modernas y seguras", detalló Blanco.
Asimismo, explicó que en el caso de las autopistas de peaje se ha "adoptado un acuerdo para dotar de estabilidad a las sociedad concesionarias" que las gestionan. Se refirió así al acuerdo alcanzado esta misma tarde por el Grupo Parlamentario Socialista con los de PP y CiU, para que el Estado asuma los riesgos de los costes de expropiación de las obras que se confíen a la iniciativa privada. La enmienda pactada fija en el 175% el sobrecoste a partir del cual Fomento aportará ayudas mediante la concesión de créditos.
AGRADECIMIENTO AL PP.
Blanco resaltó que "gracias al diálogo" los grupos "han sido capaces de resolver problemas de gran envergadura". "Quiero agradecer singularmente el diálogo y el esfuerzo realizado en este trámite por el PP y CiU", añadió.
"En ambos casos, por la importancia del problema, su repercusión en el sector y la naturaleza de estos contratos, que superan el ciclo de un partido en Gobierno, hemos querido contar y acordar la resolución final con el resto de grupos políticos en un ejercicio de responsabilidad", aseguró el ministro de Fomento.
Blanco defendió los presupuestos de su Ministerio garantizando que son los que España requiere para mantener empleos (unos 500.000), construir las infraestructuras que el país necesita y "cimentar" el nuevo modelo productivo que promueve el Gobierno.
No obstante, lamentó que el resto de administraciones públicas no hayan acompañado al Gobierno en su "esfuerzo" inversión en obra pública (superará los 19.000 millones de euros por segundo año) para "colocar a España en la mejor posición para salir de la crisis".
