MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Comunidad de Madrid prevé invertir más de 4.200 millones de euros en esta Legislatura para construir nuevas carreteras y ampliar o mejorar las actuales.
El Ejecutivo que preside Esperanza Aguirre actuará sobre 334 kilómetros de vías mediante obras que contemplan duplicaciones de calzada, ampliaciones de carriles y la eliminación de travesías, cruces y rotondas, entre otras actuaciones, según aprobó hoy el Consejo de Gobierno.
El Plan de Carreteras 2007-2011 incluye el cierre norte de la M-50 bajo el monte de El Pardo (llamada M-61), que registrará un tráfico aproximado de 40.000 vehículos al día, y tendrá una longitud de entre 24 y 33 kilómetros "dependiendo" de si Fomento asume el trazado de la M-607 a la A-1.
También figura la duplicación de la M-600, que en el programa electoral se planteaba para distintos tramos pero que el Ejecutivo autonómico quiere limitar de momento al comprendido entre Navalcarnero y la M-503 en Villanueva de la Cañada, mientras que el otro (el norte hasta Guadarrama) queda "paralizado" por que está "condicionado" al trazado de la R-6, actuación que ha salido a concurso internacional de ideas.
Todos los tramos y actuaciones que se inicien en esta Legislatura y sean "especialmente complejas, penosas o complicadas para el tráfico de vehículos" se harán en tres turnos de trabajo a fin de minimizar las molestias a los conductores, explicó en rueda de prensa el consejero de Transportes e Infraestructuras, Manuel Lamela, quien justificó estos proyectos alegando que el Gobierno regional "no puede ser ajeno" al aumento de la densidad de tráfico, que cifró en aproximadamente un 10% en la red viaria principal y un 30% en la secundaria entre 2002 y 2006.
Según sus datos, actualmente la red de carreteras de la región suma 2.533 kilómetros y el parque móvil de esta comunidad autónoma está compuesto por 3,2 millones de vehículos privados, más de 200 motos y más de 550.000 camiones. Además más de 35.000 empresas utilizan las carreteras madrileñas para transportar sus mercancías, apuntó Lamela.
"SIN PERJUICIO" DE LA NEGOCIACIÓN CON FOMENTO.
Lamela precisó que a la inversión de más de 4.200 millones prevista hasta 2011 habría que sumar los aproximadamente 62 millones anuales que se gastan en trabajos de conservación y reparación de la red de carreteras autonómica.
Asimismo, matizó que el Plan de Carreteras de la Comunidad de Madrid se plantea "sin perjuicio de lo que hoy se está hablando o negociando" con el Ministerio de Fomento, administración a la que criticó por "no actuar en la red de su titularidad pública" y que, en consecuencia, el Ejecutivo autonómico tenga que "una vez más que actuar en carreteras competencia del Estado".
En este sentido, recordó que las conversaciones con Fomento para la firma del convenio sobre carreteras se están desarrollando a "nivel técnico" y que la siguiente reunión será en diciembre, lo que le llevó a Lamela a afirmar que "hay de todo menos prisa en que esto avance".
A este respecto, el consejero de Transportes e Infraestructuras insistió en que su departamento "no acepta" los plazos propuestos por Magdalena Álvarez para licitar las obras hasta finales de 2015, cuando para Madrid es "urgente" llegar a un acuerdo que se plasme en los Presupuestos Generales del Estado de 2008.
TRABAJOS DE AMPLIACIÓN EN 178 KILÓMETROS.
En cuanto al contenido del Plan de Carreteras 2007-11, se prevén 76,5 kilómetros de nuevas carreteras repartidos en siete actuaciones distintas y con una inversión de 3.200 millones de euros. A parte del cierre de la M-50 ya citado, en este apartado figura la construcción de nuevos tramos de la M-410 (entre Moraleja de Enmedio y Arroyomolinos, y desde Parla hasta Valdemoro); la M-104 (unirá San Agustín de Guadalix y Valdetorres del Jarama), la M-224 (Torres de la Alameda-Alcalá de Henares); la M-402 (Leganés) y la finalización de la M-203.
Mientras, en el apartado de duplicaciones de calzada o ampliación de carriles, que afectará a 178 kilómetros de vías y tiene un presupuesto de más de 700 millones de euros, se propone trabajar en la M-104 de San Agustín de Guadalix a Colmenar Viejo; la M-206 de Torrejón a Loeches; y la M-100 en el término municipal de Alcalá de Henares, aparte de la M-600 antes mencionada.
Otros cien millones de euros se dedicarán a la eliminación de once travesías a su paso por el interior de municipios, con el fin de reducir el riesgo de atropellos. Villanueva del Pardillo, Campo Real y Torrelaguna se beneficiarán de esta actuación.
La supresión de 14 glorietas y cruces, y la remodelación de algunos peligrosos, se llevará unos 140 millones de euros y mejorará la seguridad vial en puntos de Fuenlabrada, la M-503 y la M-108 en Ajalvir. En este caso se trata de eliminar elementos de regulación del tráfico que resultan inadecuados en vías con una elevada densidad de vehículos.
El quinto frente de actuación consiste en actuaciones sobre carreteras actualmente en servicio que no suponen incrementar su capacidad. Prevé un gasto de 42 millones de euros y afectará a 14 kilómetros donde se pretende reordenar trazados y eliminar puntos negros, como en la M-406 de Leganés, la M-224 entre Pozuelo del Rey y Torres de la Alameda, y la avenida de los Rosales del distrito madrileño de Villaverde.
