MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Congreso convalidará mañana el límite de gasto no financiero propuesto por el Ejecutivo socialista para los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2007, con la oposición del PP y el apoyo de CiU y ERC, tras un debate en el que el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes, defenderá sus objetivos presupuestarios y la cifra de techo de gasto de 142.925,69 millones de euros.
En concreto, el titular de Economía y Hacienda informará sobre el objetivo de estabilidad presupuestaria del conjunto del sector público y de cada uno de los grupos agentes que lo integran para el período 2007-2009, así como el límite de gasto no financiero del Presupuesto del Estado para 2006.
El límite de gasto no financiero del Estado para el año 2007, en términos de Contabilidad Nacional, se situará en 142.925,69 millones de euros, lo que representa un incremento del 6,7% respecto al año anterior, en línea con el crecimiento previsto del PIB nominal.
Los objetivos de estabilidad presupuestaria para los próximos tres años contemplan un superávit del conjunto de las administraciones públicas (Estado, comunidades autónomas, ayuntamientos y Seguridad Social) del 0,7% del PIB en 2007 y del 0,8% en 2008 y 2009.
PP: PRESUPUESTO "CASI ELECTORALISTA".
En declaraciones a Europa Press, el secretario de Economía y Empleo del PP, Miguel Ángel Arias Cañete, señaló que el techo de gasto "va a dar lugar a un presupuesto muy expansivo que va a agravar las tensiones inflacionarios, y por tanto, los desequilibrios de la economía española así como la pérdida de competitividad".
A estas palabras se sumó la diputada 'popular' Fátima Báñez, quien adelantó el rechazo al límite propuesto por el Gobierno ya que "el techo de gasto producirá un incremento de gasto público muy importante, y el Ejecutivo se sigue olvidando de la política económica con la ausencia de reformas necesarias". Respecto a los proyectos laboral y fiscal, "son insuficientes", subrayó.
Los 'populares' creen que el Gobierno "profundiza en los desequilibrios lejos de beneficiar la economía española". Además, aseguran que se trata de "un presupuesto casi electoralista, que está pensado más para tiempos de elecciones que para remediar los verdaderos problemas de la economía española".
Para Báñez, que defenderá mañana su posición en el Pleno, la "economía española sigue creciendo pero con unos desequilibrios muy importantes" porque se está renunciando a que "la gran protagonista de la política económica del Gobierno al estar en la Unión Monetaria sea la política presupuestaria" con el techo de gasto que se presenta para el año que viene". "Se hace lo contrario de lo que hay que hacer, que es una contención del gasto y presentar un superavit más generoso", dijo.
CIU Y ERC VOTARÁN 'SÍ'.
Por contra, tanto el grupo parlamentario de CiU como el de ERC, que dieron apoyo al Gobierno en los últimos Presupuestos Generales, refrendarán mañana el techo de gasto propuesto por el Ejecutivo socialista, según confirmaron a Europa Press fuentes parlamentarias.
El trámite del debate y posterior votación, que supone el primer paso para la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado de 2007, viene precedido de los acuerdos adoptados entre Gobierno y CiU en la reforma fiscal, lo que hace prever otra posible alianza con los nacionalistas catalanes en materia presupuestaria.
Desde el punto de vista de ERC, el hecho de que se haya aprobado una nueva Ley de Estabilidad Presupuestaria "ha supuesto mejoras" al respecto, pero "no una solución definitiva si no se resuelve el modelo de financiación local mediante la modificación de la ley de Haciendas Locales", según explicó el portavoz independentista Joan Puig, que añadió que con la ley de Estabilidad Presupuestaria la situación pasó "de negro a gris".
En principio, los republicanos apoyarán la propuesta de Solbes para los próximos Presupuestos Generales del Estado pero incidirán en la "elaboración de un calendario de reformas que afecten al resto de administraciones y a comunidades autónomas" como la mencionada.
PNV: MENOS PROBLEMAS QUE EN 2005.
Por su parte, el portavoz del PNV, Pedro Azpiazu, recalcó hoy, un día antes de decidir el voto, que "es prematuro" establecer su sentido, pero sí recordó que "ya no existen los problemas que había el año pasado, que ahora están resueltos y que están relacionados con el Cupo y el Prestige por una parte, y por otra, con la nueva ley de estabilidad presupuestaria".
Sin embargo, dejó claro que "esto no quiere prejuzgar ninguna posición, sólo que estamos en una situación desde el punto de vista político". "Hay que tener en cuenta una serie de problemas estructurales de la economía española" antes de decidir qué posición tomarán respecto al techo de gasto propuesto por el Gobierno, explicó.
IU-ICV: ABSTENCIÓN PORQUE ES "UN RETROCESO".
Del lado de IU-ICV, el diputado Joan Herrera señaló que en principio su grupo "se va a abstener" ya que se trata del "primer presupuesto no expansivo, de crecimiento cero, y en el que "el gasto público y el acercarnos en gasto social a la media europea va a ser estable", por lo que en su opinión supone "un retroceso".
"Teníamos presupuestos en los que nos acercábamos a Europa en gasto público y social, pero éste es el primero en que no nos acercamos", explicó. Además, dejó claro que en una fase de crecimiento económico es "razonable" que haya superávit, por lo que el problema no está ahí, sino en los ingresos.
"Si crecemos menos es porque en definitiva Solbes ha renunciado a ingresos en la reforma fiscal que pueden superar los 6.000 millones de euros a partir de esa reforma fiscal", dijo. Para Herrera es "paradójico que esa renuncia se produzca en año que hay que implementar la leyes como la de Dependencia".
De cualquier manera, subrayó que su postura "no es la del PP" ya que no pretenden parar el techo de gasto". IU-ICV no quiere "que se rechace al 100%" pero tampoco puede "estar de acuerdo con una propuesta que es una renuncia al crecimiento".
Además, Herrera recalcó que el Gobierno actual "estaba muy preocupado en al reforma de los estatutos y en la paz del País Vasco dejando la política económica a Solbes". Así, "el problema está en que este techo es una limitación clara a los objetivos sociales de este Gobierno", concluyó.