MADRID, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
La oposición en el Congreso ha lamentado este jueves que el Gobierno haya "perdido la oportunidad" de hacer una reforma profunda del sistema energético español y que, con su proyecto de ley de Medidas Fiscales para la Sostenibilidad Energética, que ha recibido luz verde definitiva, sólo busquen recaudar para hacer frente al déficit tarifario que, no obstante, pronostican no se atajará.
El portavoz socialista de Energía, José Segura, ha criticado al partido mayoritario por "no prestar atención" ni a los productores de energía eléctrica ni a las formaciones políticas, que de forma mayoritaria rechazarán las enmiendas al proyecto de ley procedentes del Senado que se han debatido en la última sesión plenaria del año en la Cámara baja.
"Tras quince años, creemos que ha llegado el momento de adaptar la Ley Energética de 1997 a una nueva realidad vinculada al crecimiento de la sensibilidad ciudadana respecto al cambio climático y a la potenciación de las renovables. Pero ustedes se mueven exclusivamente siguiendo la línea directriz de reducir el déficit tarifario con planteamientos recaudatorios, y pierden la oportunidad de modernizar el sistema energético nacional", ha dicho el diputado canario.
TRAMITACIÓN "CAÓTICA"
Además, ha advertido de que el Ejecutivo de Mariano Rajoy está aproximando al sistema a "una gran burbuja energética" y desaprovechando la oportunidad de impulsar un "mix moderno, como corresponde al siglo XXI". "Se han negado a traer a esta Cámara, con consenso, un proyecto que remplace la amplia normativa del sector, que ya ni los expertos son capaces de desentrincar", ha insistido.
Finalmente, ha criticado a los 'populares' por una tramitación parlamentaria de la norma que considera "caótica" además de "falta de rigor, de seriedad, de método y de calidad argumental". "Este proyecto coge de dos manos (los ministerios de Industria y de Hacienda) que no se coordinan", ha zanjado.
SE CASTIGA A LAS RENOVABLES
La portavoz en esta materia de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), Laia Ortiz, ha asegurado que esta ley "hunde el posible tránsito a un nuevo modelo energético" y es un ejemplo de la "manipulación" del Gobierno. En su opinión, "de la sostenibilidad energética que da nombre a la norma, lo único que se sostiene es la mala regulación del modelo, la inequidad y el castigo a las renovables". "Antes de tomar decisiones erráticas escuchen y dialoguen", ha sentenciado.
Por su parte, el portavoz adjunto de UPyD, Carlos Martínez Gorriarán, cree que esta reforma es "una verdadera calamidad" porque se pierde la oportunidad de hacer una "política energética digna de tal nombre" y se "sustituye por una estrategia puramente recaudatoria" que "exprime de nuevo a productores y consumidores" sin con ello conseguir solventar el problema del déficit de tarifa.
"Se desaprovecha la oportunidad de cambiar el modelo económico, se penaliza la eficiencia y la innovación con el maltrato a las renovables, se mantiene la confusión en la fiscalidad, se favorece la dependencia al favorecerse el consumo de hidrocarburos y carbón y las citas a criterios medioambientales son puramente cosméticos y oportunistas", ha acusado.
Tras subrayar que el Senado "ha empeorado" el proyecto tal y como salió de su debate en el Congreso, el diputado de UPyD ha advertido al Ejecutivo de que esta ley perjudicará a la competitividad de las empresas y provocará un "retroceso en el I+D" del sector que llevan a cabo las empresas de renovables, a la par que "se mantiene lo peor de lo que ya ha fracasado".
PERJUDICARÁ A LOS CONSUMIDORES
El diputado de CiU Josep Sánchez Llibre se mostró "decepcionado" ante una reforma que "perjudicará" especialmente a las familias, que verán incrementada su factura de la luz en un 6% a partir de 2013. Por el contrario, los principales beneficiados serán Francia, Alemania e Italia, ya que serán el destino de muchas deslocalizaciones y porque ganarán cuota industrial ante la pérdida de competitividad que la reforma supondrá para las empresas españolas.
Por ello, se ha dirigido al ministro de Industria, José Manuel Soria, para decirle que "va a ser el menos industrial que ha pasado en los últimos 30 o 35 años de democracia", mientras que esta ley "va a suponer un retroceso importante de 50 años en la política industrial".
El portavoz del PNV, Pedro Azpiazu, ha asegurado que, a tenor de la ley, "el déficit tarifario no tendrá una solución satisfactoria". Como la mayoría de los grupos, el nacionalista vasco ha lamentado que el Gobierno haya optado por "el no consenso y por el ni siquiera escuchar las vías de solución" que desde el PNV se han planteado.
MEDIDAS CORTOPLACISTAS
La diputada de Amaiur Maite Ariztegui ve "hipócrita" pensar que "el problema de la crisis energética se resolverá pensando y actuando del mismo modo que cuando se creó". Tras calificar la ley de "parche recaudatorio y cortoplacista", la diputada ha emplazado al Gobierno a "cambiar radicalmente el modelo hacia otro más eficiente y sostenible, económica pero también ambientalmente".
Pedro Quevedo (CC-NC) ha lamentado que se "pierde una enorme oportunidad de regular un sistema energético opaco, confuso y casi imposible de entender" y ha defendido que las prioridades deberían ser "apoyar la producción de renovables y gravar más las energías sucias", cosa que no se hace con este proyecto de ley.
El diputado de UPN, Carlos Salvador, ha reclamado un "gran pacto nacional sobre el futuro de la energía", y ha expresado sus dudas sobre el modelo que propone el Gobierno. "Nosotros defendemos un modelo menos dependiente, menos agresivo con el medio ambiente y más democrático", ha dicho, lamentando la "sensación amarga" que la "mucha improvisación y poco diálogo" de la tramitación de la reforma les ha dejado. Finalmente, ha dudados sobre si las formas y tiempos propuestos para atajar el déficit de tarifa son los adecuados.
Por el Grupo Popular, el portavoz Antonio Erías ha defendido que en este proyecto de ley "no hay improvisación y menos inseguridad". "Da certeza y despeja incertidumbres (sobre la tarifa eléctrica) para que no exista insostenibilidad económica", ha señalado para admitir que no se pueden garantizar "efectos tasados".
Según ha dicho, la norma "completa acciones que el Gobierno ha tenido que adoptar a su pesar, porque la política energética no debe ser embridar el gasto". "En el Senado se ha mejorado el texto", ha sentenciado en contra de la opinión del resto de los grupos.
