Dice que mientras el recurso del Ayuntamiento no se solvente habrá una situación de provisionalidad que no beneficia nada a la entidad
MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PP de Madrid, Francisco Granados, aseguró hoy que su formación "no abre ni cierra la puerta" en Caja Madrid "en función de que se aplique o no la norma", sino que el Gobierno regional está abierto "de par en par a cualquier sugerencia del presidente nacional".
"Nosotros no abrimos ni cerramos la puerta en la caja en función de que se aplique o no la norma. Está igual de abierta, es decir, de par en par, a cualquier sugerencia del presidente nacional", afirmó Granados en declaraciones a la Cadena Cope recogidas por Europa Press.
No obstante, Granados reconoció que las conversaciones que mantuvieron ayer la Dirección nacional y la regional del partido para llegar a un acuerdo sobre la Presidencia de Caja Madrid no tuvieron ninguna conclusión. "No estuvo cerca el acuerdo porque entre otras cosas no está en nuestra mano llegar a un acuerdo en la Presidencia de la Caja. En la Caja hay que dejar bien claro que el PP no tiene mayoría, necesitamos pactar con otras de las entidades allí representadas, con empresarios, con sindicatos, con otros partidos políticos y no estamos en disposición de cerrar ningún acuerdo con respecto a la gobernabilidad de la Caja", explicó.
También señaló que de lo que más se habló ayer en Génova fue de las declaraciones del vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, un asunto que, a su juicio, "es necesario arreglar" y al que hay que "poner coto". Desde su punto de vista, las afirmaciones de Cobo deben ser objeto de un expediente disciplinario. "Hablamos varias veces sobre esa cuestión que, desde luego, no hay que mezclarla en absoluto con la Caja porque son dos cosas distintas", apuntó.
Además, Granados insistió en que "no hay una lucha de poder interna" dentro del PP, y que en todo momento se ha respetado la autoridad del presidente del PP, Mariano Rajoy. En este sentido, reconoció que existen dos cuestiones en estos momentos sobre la mesa, por un lado las declaraciones "desafortunadas" del Cobo sobre Aguirre y por otro, el cumplimiento de la Ley de Cajas.
A su juicio, son dos cuestiones que por principio no se pueden mezclar. "La aplicación de la norma no puede estar sujeta a llegar a un acuerdo en ninguna otra cuestión. Aquí hay un señor que ha hecho unas declaraciones absolutamente inaceptables e injuriosas, calumniosas e insultantes contra un miembro del partido, en este caso la presidenta de la Comunidad y del partido en Madrid y eso está sujeto a un régimen sancionador independientemente de cualquier otra cuestión", sentenció. "Tampoco quiero yo decir que el partido a nivel nacional, la secretaria general, quiera mezclarlo. Creo que ella es consciente de que este asunto es grave y que hay que arreglarlo", opinó.
Por otro lado, auguró que llegarán a un acuerdo y se sentarán "para hablar sobre la gobernabilidad de la caja sin ningún tipo de problema", pero opinó que no es bueno el condicionar la aplicación de la norma a ninguna otra cuestión.
Respecto al hecho de que, aparentemente, no toda la dirección nacional está a favor de expedientar a Cobo, Granados dijo desconocer qué piensan, pero subrayó que "las declaraciones del lunes son de libro". "Aplica uno los Estatutos del partido y no tiene ninguna duda de que un señor no puede despacharse de la manera que lo hizo. Son unas declaraciones que ni siquiera he visto de un miembros del PSOE a un miembro del PP o al revés. Por lo tanto, creo que la gravedad hace necesaria la aplicación de la norma", planteó, al tiempo que destacó que con esto no quiere "mediatizar ni siquiera presionar al comité de derechos y garantías, pero es que es una cuestión muy clara".
"Nosotros no estamos cerrados a hablar de cualquier cuestión que nos plantee el presidente nacional del partido. ¿Pero cómo vamos a estar cerrados? Todo lo contrario. Cualquier indicación será, como es lógico, bienvenida, valorada y si quiere aceptada. No es esa la cuestión ni mucho menos", consideró.
En este sentido, Granados subrayó que la entidad en este momento desde el punto de vista de la renovación de los órganos se encuentra paralizada porque hay un recurso del Ayuntamiento de Madrid en los tribunales. "Esto es lo que ha paralizado el proceso de renovación de los órganos de dirección de la caja y mientras ese recurso no se solvente estaremos en esta situación de provisionalidad que no beneficia nada a la cuarta entidad financiera del país y más en la situación económica en la que estamos", zanjó.
Preguntado por la batalla entre Aguirre y Rajoy, el secretario general del PP de Madrid negó la mayor: "No hay ninguna lucha de poder. Nosotros no estamos manteniendo ninguna lucha de poder interno en el seno del partido. Reconocemos total y absolutamente la autoridad del presidente nacional".
"No es esto una cuestión de lucha de poder, aquí hay dos cuestiones, las dos bien diferentes y que tienen una solución muy clara. La primera, las palabras de un señor en un medio de comunicación poniendo, por decirlo coloquialmente, a caer de un burro a la presidenta de la comunidad de Madrid", dijo Granados en primer lugar.
La otra cuestión son los órganos de decisión en la caja y cómo se renuevan. "Este proceso está paralizado por un recurso del Ayuntamiento de Madrid y hasta hace muy pocas semanas nosotros no teníamos ninguna noticia de ninguna preferencia para presidir la caja y los órganos de la caja han actuado en consecuencia, conformando en este caso alrededor de Ignacio González, una mayoría. Y esto es todo. No hay ninguna lucha de poder ni estamos por meterle presión a nadie", recalcó.
En este contexto, el secretario general apuntó que "lo que sí se ajusta a la realidad es que las declaraciones de Cobo en absoluto ayudan a que el clima en el seno del partido sea el que tiene que ser". "Y no son buenas para que lleguemos a un acuerdo en cualquier cuestión. En esto de la caja, no es tan sencillo como que el PP de Madrid acepte o no a un candidato. Hay un acuerdo prácticamente cerrado con un montón de entidades, entre otras con el PSOE e IU, sindicatos y empresarios y eso no se cambia de un día para otro", advirtió.
"Necesitamos una reflexión y estamos dispuestos a hablar absolutamente de todo. Nunca nos hemos negado a hablar sobre este asunto, pero entenderán que lo del señor Cobo no ayuda", insistió.
LAS PALABRAS DE COBO
Para Granados, la frontera entre la crítica lógica desde el punto de vista político a lo que te gusta más o menos y la injuria, "es la descalificación personal pura y dura". "En esa entrevista no hay ninguna critica ideológica, es desde la primera a la última palabra, una sarta de insultos. Es la continua repetición de la descalificación", declaró.
A su juicio, en las palabras de Cobo se ve que "el rechazo al posible liberalismo se adereza con palabras de Bertold Brecht en referencia al nazismo, al 'gestapillo' en referencia al estudio del supuesto espionaje en la Comunidad de Madrid, constantes referencias al 'fascismo'... Creo que esto está muy claro cuando el alcalde dice hay que leer las declaraciones muy en profundidad. Creo que cuando se leen en profundidad son todavía peor", sentenció.
Para él, "no hay ni una sola crítica desde el punto de vista político". "La única que hay es sobre algunas cuestiones relacionadas con el partido. Nunca he visto a Cobo votar en contra de las decisiones que ha tomado el comité ejecutivo de mi partido y él es miembro. Siempre le he visto votar a favor, a parte de defender de manera muy entusiasta la candidatura de Esperanza Aguirre hace un año a la presidencia del partido. Si era tan mala, no sé por qué se la defendía con esa vehemencia por parte del alcalde y del vicealcalde", zanjó el responsable popular.
