La Asamblea de la Caja aprueba el presupuesto de la Obra Social para este año, que asciende a 37,9 millones
SAN SEBASTIÁN, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Kutxa, Xabier Iturbe, ha propuesto la creación de un grupo en la Asamblea de la Caja que analice "con números" la situación relativa a los desahucios y ha anunciado fondos, a través de la Obra Social, para paliar el efecto de los mismos.
Iturbe se ha referido en estos términos en la asamblea ordinaria de la Caja, celebrada este viernes en San Sebastián, la última en la que se tratan las cuentas anuales de la entidad, en este caso correspondientes a 2011, tras su integración en Kutxabank junto a BBK y Caja Vital.
El presidente de Kutxa ha presentado también el informe de gestión 2011 y el presupuesto 2012 de la Obra Social de la Caja guipuzcoana y ha autorizado la designación de auditor y el informe de remuneraciones.
De las 100 personas que componen la Asamblea, han participado en el encuentro 92 consejeros generales. La aprobación de las cuentas anuales ha contado con el voto favorable de 49 consejeros, la abstención de 25 y no se han producido votos en contra.
El informe de gestión y presupuesto de la Obra Social para el presente ejercicio, que alcanzará los 37,9 millones de euros, ha tenido 50 votos favorables, 25 abstenciones y tampoco ha habido votos contrarios. La designación de auditor, para el que se ha propuesto que sea, al igual que lo es para Kutxabank la empresa Deloitte, ha contado con el voto favorable de 52 consejeros, la abstención de 21, sin votos en contra.
El cuarto punto sometido a la consideración de la Asamblea, relativo a las remuneraciones de los miembros del Consejo de Administración y Comisión de Control, presentado con carácter consultivo, ha recibido 41 votos a favor, 33 abstenciones, y tampoco ha contado con ningún voto en contra.
La Asamblea General ha recibido el informe de la Presidencia en el que Iturbe ha contextualizado el desarrollo de la actividad financiera de Kutxa en "un entorno de crisis económica y financiera, con particular repercusión en el empleo y de cambios regulatorios y políticos".
En su intervención, se ha referido al problema de los desahucios por impago de préstamos hipotecarios. "Somos conscientes y sensibles a la dramática situación que están atravesando los más desprotegidos en relación a las causas de la crisis y el efecto que el paro, principalmente, está teniendo en las familias y en las economías más débiles", ha expresado.
En este sentido, ha asegurado que Kutxa ha actuado voluntariamente "en cientos de casos reestructurando la deuda, sus plazos y tipos de interés", aunque a partir de ahí y "en casos muy puntuales y poco frecuentes, no hay otra posibilidad que la de actuar mediante reclamación judicial".
Iturbe ha explicado que el plazo medio desde que se produce el primer impago de un préstamo hasta el requerimiento judicial que se debe realizar para no perjudicar el derecho de cobro es de dos años y otros dos más el del plazo medio hasta que se solicita la adjudicación, "como medida definitiva e inevitable para que la cuenta de resultados no se vea gravemente perjudicada".
Según ha indicado, el número de ejecuciones de desahucio realizadas por cada mil habitantes en el País Vasco, en el periodo 2007/2011, es de 2,2, siendo la media estatal de siete ejecuciones. Iturbe ha asegurado que ni Kutxa, ni Kutxabank tienen "ningún deseo de hacerse con un parque de viviendas procedentes de impagos que no le causan más que problemas", y por eso actúa "con comprensión y flexibilidad siempre que el cliente quiera y pueda pagar". "Pero otra cosa es que perjudiquemos, por una actuación negligente, la cuenta de resultados", ha añadido.
En este contexto, ha anunciado que Kutxa tiene una propuesta de dotar y canalizar las ayudas que sean necesarias para paliar los efectos de esta situación, pero siempre a través de los fondos de la Obra Social.
OBRA SOCIAL
La Asamblea ha conocido también el marco de actuación para el periodo 2012-2015 de la Obra Social, un Plan Estratégico trazado con la aportación de un grupo de trabajo promovido por iniciativa de la propia Asamblea que ha señalado unas líneas de actuación interanual.
Con el medio ambiente y la sostenibilidad como ejes, Iturbe ha desgranado el proyecto EkoKutxa que tiene su expresión en el Kutxa Ekogunea, "un espacio destinado a ofrecer los medios necesarios para que la sociedad guipuzcoana pueda aproximarse a la cultura y las prácticas sostenibles", que la Fundación Kutxa construye en 27,6 hectáreas de terreno entre San Sebastián y Hernani con un presupuesto de 15 millones de euros.
RUEGOS Y PREGUNTAS
Un total de seis miembros de la Asamblea han tomado la palabra en la sesión de este viernes. El primero en hacerlo ha sido Luix Barinagarrementería, portavoz de Banatuz, quien después de acusar a Kutxa de "ingeniería financiera" y lamentar el empobrecimiento de la entidad por causa de la especulación inmobiliaria, ha denunciado el "interés partidista" de KutxaBank y la "usurpación de la representación en Kutxa de quienes ganaron las elecciones de 22 de mayo pasado".
En nombre de LAB ha intervenido Txema Maritxalar, quien ha contratado la "retórica del lenguaje" de la dirección de la Caja con "la realidad que fomenta el desempleo, prima la eventualidad, provoca el cierre de oficinas y el traslado de empleados que, entre otros efectos, contraría la política lingüística de Kutxa". Además, ha denunciado el "marco español de relaciones laborales de Kutxabank".
Jesús Mari Agirrezabala, que fuera alcalde de Deba, ha felicitado a la dirección por su gestión y anunciado su abstención personal por compromiso político. Por su parte, Arantza González de IU-Ezker Anitza ha pedido se traslade a Kutxabank el escrito que a la entrada a la Asamblea repartían unos miembros de la plataforma 'Stop desahucios', solicitud a la que se ha sumado el consejero por CCOO Pablo Rivero.
