Asegura que la guerra del pasivo "es una sangría" que hay que cortar cuanto antes
MADRID, 5 May. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado del BBVA, Ángel Cano, aboga por que el Gobierno implante con la mayor profundidad posible una reforma laboral que dé lugar al mercado "más flexible de Europa", por considerar que esta fórmula permitirá agilizar el crecimiento de la economía y la creación de puestos de trabajo.
Esta iniciativa podría ser "la palanca de recuperación del empleo y de la confianza", consideró el 'número dos' del BBVA, para quien "el mundo está esperando a que se implemente esta reforma" y que culmine la reestructuración de las cajas de ahorros en España.
A falta de que los agentes sociales cierren la reforma de la negociación colectiva, el consejero delegado BBVA apostó por una modificación "de calado y lo antes posible" que contribuya a generar confianza en los mercados a escala nacional y de empresas.
Cuando el coste de los despidos es menos elevado, no hay miedo a volver a contratar, dijo Cano, partidario de que las empresas "puedan desvincular su vida del comportamiento de un convenio sectorial". Entre estar parado y trabajar con un esquema que permita mayor margen de maniobra al empresario, "la gente lo que quiere es trabajar", ilustró.
Al ser preguntado sobre los planes de prejubilaciones del banco, Cano recalcó que éstos nunca han acarreado ningún coste al sector público y descartó de plano que en el BBVA se realicen por sistema a partir de los 53 años.
CAJAS Y SUPERDEPÓSITOS.
En cuanto a la reestructuración de las cajas, incidió en la necesidad de que el proceso culmine "cuanto antes" para que una mejor canalización del crédito permita reactivar la economía, al tiempo que criticó las prácticas de algunas entidades que han recibido respaldo del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
"Si todos tuviéramos accionistas privados, claramente la batalla del precio de los depósitos dejaría de estar sobre la mesa, porque todos tendríamos que rendir cuenta ante los accionistas", argumentó Cano, contrario a actuaciones que supongan una pérdida de valor para el conjunto del sistema financiero.
La guerra del pasivo "es una sangría con la que hay que acabar lo antes posible para recuperar la confianza", sostuvo el consejero delegado del BBVA durante la presentación de los resultados trimestrales a los medios de comunicación.
Aunque se mostró a favor de la iniciativa del Gobierno de penalizar los depósitos de excesiva remuneración a través de una mayor aportación de las entidades que los ofrezcan al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), Cano consideró que la medida tendrá un "efecto escaso".
"¿Limitar el precio de los depósitos con regulación?... haciendo números sencillos, el impacto que puede tener es poco relevante", estimó el directivo, si bien agregó que su repercusión se puede inscribir más en el punto de vista de la "sanidad" de la reestructuración financiera.
EL RESCATE DE ESPAÑA, REMOTO
Por otro lado, Cano consideró que la hipótesis de que España necesite un rescate de la UE, como Grecia, Irlanda o Portugal, es tan remota que la entidad ni siquiera la contempla.
Estos países no tienen "absolutamente nada que ver ni por tamaño ni por potencial de crecimiento con España", enfatizó el consejero delegado de BBVA quien, sin embargo, da por descontada la reestructuración de la deuda griega.
En este sentido, indicó que el conjunto del mercado prevé una modificación de la deuda del país heleno y que cuanto antes se despeje la incertidumbre al respecto, mejor. "Es difícil que España padezca una infección de ningún tipo", reiteró.
