Gescartera.- Fernández Armesto dice la CNMV discutió intervenir en 1999 pero no había certeza de desfase patrimonial

El testigo afirma que el director de la inspección de 1999 "pasará a la historia porque tenía razón"

Europa Press Economía Finanzas
Actualizado: lunes, 12 noviembre 2007 13:51

MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) Juan Fernández Armesto declaró hoy como testigo en el juicio oral por el escándalo financiero de Gescartera, donde afirmó que en la reunión extraordinaria del consejo celebrada el 16 de abril de 1999 se discutió intervenir la agencia de valores.

Armesto, que presidió el organismo regulador entre octubre de 1996 y octubre de 2000, explicó que no se optó por intervenir porque el entonces director de Supervisión, David Vives, tenía el "convencimiento" pero no la "certeza" de la existencia de un desfase patrimonial de 27 millones. Durante la reunión se discutió el informe 'Borrador sujeto a cambios' sobre las irregularidades detectadas en Gescartera.

Según transcendió durante la fase de investigación, durante dicha reunión los consejeros Pilar Valiente, Luis Ramallo y José María Roldán se postularon en contra de la intervención, mientras que Armesto, Vives y el consejero Juan Antonio Barberán se manifestaron a favor.

El debate no quedó reflejado en el acta de la reunión, que Armesto calificó de "hito" y "única" en sus cuatro años de mandato. La razón por la que se convocó el consejo "por teléfono" y sin un orden del día establecido fue que la dirección de Supervisión "estaba proponiendo intervenir".

El testigo afirmó que el descuadre no se detectó bajo su mandato y que Vives "pasará a la historia porque tenía razón". Según explicó, la intervención suscitó un "amplio intercambio" entre los consejeros de la CNMV, aunque la reunión finalizó con la ampliación del expediente sancionador abierto diez días antes de la reunión con la adopción de medidas cautelares y una sanción a los responsables de Gescartera por obstruir la inspección.

Las medidas cautelares adoptadas establecieron la "prohibición" de captar nuevos clientes, la "obligación" de informar a los bancos de la apertura de medidas cautelares y la "individualización" de las cuentas conjuntas con los fondos de los clientes, explicó el testigo. Todos los inspectores declararon durante el juicio que el control de las medidas cautelares se dejó en manos de Gescartera, por su parte, Armesto afirmó que él no era la persona que controlaba las medidas y que quedó "razonablemente satisfecho" de la labor de la CNMV.

CONVENCIMIENTO DE LA PRESENCIA DEL DINERO.

Armesto, que acudió a declarar a petición de la defensa de Antonio Camacho, declaró que la CNMV finalizó el año 2000 con el "convencimiento" de que el dinero estaba depositado en una Sociedad de Inversión de Capital Variable (Sicav) en Luxemburgo.

Los responsables de Gescartera justificaron la presencia del dinero con un certificado bancario del Hong Kong and Shanghai Banking Corporation (HSBC) que iba a gestionar la sicav y un informe de auditoría favorable de Deloitte and Touche, sancionado posteriormente por el ICAC.

El director de la Unidad de Vigilancia de los Mercados, Antonio Botella, fue quien presentó esta documentación que, según Armesto, supuso una "alegría inmensa". Botella sustituyó a Vives en la dirección de la inspección tras la reunión de 16 de abril de 1999 por sus malas relaciones con los responsables de Gescartera derivadas de los intentos de obstruir la investigación.

El testigo explicó que "para la gloria de Vives" también en ese momento me dijo que el expediente "se estaba cerrado en falso". Esta documentación presentada por Gescartera junto con la disposición de la Fundación Once a tomar el 10% de Gescartera y el 25% del capital de la Holding, así como la información favorable a los saldos presentada por el Arzobispado de Valladolid llevaron al consejo de la CNMV a autorizar la conversión de Gescartera de sociedad gestora de carteras a agencia de valores.

El 3 de julio de 2000 el consejo de la CNMV autorizó la conversión en la misma reunión en la que se cerró el expediente sancionador con de Gescartera con una sanción de 42.000 euros a la empresa y de 18.000 euros a sus responsables por irregularidades contables. El Ministerio de Economía ratificó el 6 de octubre de ese mismo año el cambio de estatus jurídico de Gescartera ya bajo la presidencia de Pilar Valiente.

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