El Gobierno italiano critica la rebaja de S&P, ya que no tiene en cuenta las últimas medidas adoptadas

Actualizado: miércoles, 10 julio 2013 20:01

Acusa a la agencia de realizarla en la víspera de una emisión de deuda "anunciada y bien conocida"


ROMA, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno italiano ha criticado este miércoles la decisión de Standard & Poor's (S&P) de rebajar en un escalón el rating de Italia, hasta 'BBB' con perspectiva 'negativa', la víspera de una emisión de deuda "anunciada y bien conocida", ya que está basada en datos del pasado y no tiene en cuenta las últimas medidas adoptadas por el Ejecutivo.

"Como en ocasiones anteriores, la decisión se basa en una extrapolación mecánica de datos y situaciones del pasado, con poca o ninguna consideración por los efectos de las medidas ya adoptadas o en proceso de ejecución", afirma el ministro de Economía y Finanzas, Fabrizio Saccomanni.

En este sentido, el titular de Economía recalca que Standard & Poor's evalúa el futuro de la economía italiana "esencialmente sobre la base de la percepción del riesgo, que por supuesto sólo tiene en cuenta los peores escenarios".

La agencia de calificación justifica su decisión de rebajar la calificación de la deuda italiana en dos factores: el debilitamiento del crecimiento y el mal funcionamiento del mecanismo de transmisión monetaria.

A este respecto, Saccomanni incide en que "ignora totalmente" los recientes datos de coyuntura y los efectos de las medidas de estímulo y las reformas adoptadas, a diferencia de lo que han hecho otras instituciones como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea (UE), que prevén que el crecimiento vuelva en el cuatro trimestre de este año y 2014.

Sobre el segundo factor, señala que es un asunto de "importancia europea" y que las autoridades italianas y las instituciones europeas, como la Comisión, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y el Banco Central Europeo (BCE), han tomado ya medidas.

Por este motivo, el ministro informa de que ha reabierto el debate sobre la función de las agencias de calificación en sedes oficiales, ya que unas decisiones que no están apoyadas por un análisis compartido pueden tener efectos "pro-cíclicos y desestabilizadores".

Por otro lado, incide en que este hecho confirma también la necesidad de que Italia continúe rápidamente con la senda prevista por el Gobierno de estimular el crecimiento, para arreglar con las reformas correspondiente las debilidades estructurales de la economía, teniendo en cuenta al mismo tiempo la consolidación de las finanzas públicas.

"Al final, lo que contará será la evaluación que realicen los ahorradores italianos y los extranjeros que invierten en nuestros títulos", concluye.