BRUSELAS, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El nivel de impuestos en España se situó en el 35,4% del PIB durante el año 2004, más de cinco puntos por debajo de la media de la Unión Europea a Veinticinco (40,7%) y de la zona euro (41,1%), según los datos difundidos hoy por la oficina estadística comunitaria, Eurostat. La presión fiscal española aumentó ligeramente respecto a la cifra de 2003, el 34,8% del PIB.
Los mayores ingresos fiscales corresponden a Dinamarca (49,9% del PIB), seguida de Bélgica (47,4%), Francia (45,3%), Finlandia (44,5%) y Austria (44,3%). Los porcentajes más bajos se observaron en Lituania (28,7%), Letonia (29,1%), Eslovaquia (30,6%), Irlanda (31,7%), Estonia (32,7%) y Chipre (33,7%).
En comparación con el año 2003, la proporción de ingresos fiscales sobre el PIB aumentó en 2004 en 14 Estados miembros, disminuyó en 10 y se mantuvo estable en Suecia. Las subidas de impuestos más importantes se registraron en Malta (de 34,5% a 36,7%), en Irlanda (de 30,4% a 31,7%), y en Dinamarca (de 48,7% a 49,9%) La presión fiscal bajó especialmente en Grecia (del 39% al 37,7%), en Alemania (del 41% al 40%) y en Italia (del 43% al 42,1%),
Por lo que se refiere al reparto de los ingresos fiscales entre las tres grandes categorías de impuestos, en el caso de España, los impuestos sobre la producción y la importación, como el IVA, representan el 12,2% del total; las cotizaciones sociales también el 12,2%; y el impuesto sobre la renta y sobre el patrimonio el 10,2%.