Economía/29M.- La reforma laboral contribuirá a una destrucción de hasta 807.000 empleos en 2012, peor que en 2009

Jesús Caldera, Director De La Fundación Ideas
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 27 marzo 2012 21:01

El salario medio podría caer hasta un 2,5% este año


MADRID, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -

El director de la Fundación Ideas y ex ministro de Trabajo socialista, Jesús Caldera, ha asegurado que la reforma laboral contribuirá a una pérdida de entre 738.000 y 807.000 puestos de trabajo a lo largo del año, por encima de los 635.000 previstos por el Ejecutivo, con lo que 2012 será un año aún peor en términos de empleo que 2009, hasta ahora el más duro de la crisis.

Esta estimación se recoge en el documento 'Reforma laboral y crisis: efectos sobre la economía española' de la Fundación Ideas, afín al PSOE, que Caldera presentó en rueda de prensa, en la que explicó que una parte de la destrucción de empleo estará directamente relacionada con la senda recesiva de la economía y otra, que no llegó a precisar, por los efectos de la reforma laboral.

Según concretó, por lo que respecta a la reforma, vendrá a sumar más despidos al dar mayores facilidades para ello a los empresarios y ahondará en la recesión económica por una inevitable reducción del salario medio de entre el 2% y el 2,5% en términos, que detraerá aún más el consumo y generará un margen que podría ir a parar, no a la economía, sino a la reparación de los balances de las empresas.

Además, Caldera precisó que del ajuste adicional del empleo que plantea el Gobierno, de unas 635.000 personas, más del 50% se concentrará en el sector público y que el mayor daño de la reforma laboral se dejará ver en las empresas privadas, aunque también facilita "extraordinariamente" los despidos en las administraciones.

NO SE CUMPLIRÁN LOS OBJETIVOS DE DÉFICIT.

Así pues, Caldera planteó los efectos de la reforma laboral como una suerte de metástasis que afectará a la economía por la vía de los despidos y la reducción de salarios. Según argumentó, estos dos factores penalizarán el consumo interno y, por ello, acentuarán la caída del PIB hasta una horquilla del 2% y el 2,2%, también superior a la previsión del Gobierno, del 1,7%.

El informe de la Fundación Ideas va aún más allá y precisa que con la caída del empleo y el consumo, se producirá un mayor gasto en desempleo y menores ingresos tributarios que derivarán en una desviación del déficit del 5,5% o el 5,6%, que implicaría un ajuste presupuestario en 2012 de entre el 36.883 y el 37.901 millones de euros.

Caldera aseguró que "de estas consecuencias no nos va a librar nadie" y afirmó que, aunque el Gobierno "ha buscado" los efectos más inmediatos de la reforma --facilitar el despido y lograr una devaluación interna vía salarios para ganar competitividad--, "no los ha tenido en cuenta en sus análisis de perspectivas de la economía". Ello le ha servido para asegurar, sin aventurarse con cifras en la mano, que "2013 va a ser muy mal año también".

Asimismo, el director de la Fundación Ideas, que justificó la publicación del informe, no por la proximidad del 29-M, sino por el inicio del debate sobre los efectos de la reforma y la posibilidad de influir en el trámite parlamentario, ha arrojado unas cuantas críticas más sobre el contenido a corto y medio plazo de la reforma.

En lo más inmediato, ha puesto el acento en un "desastroso uso" de la flexibilidad interna, por cuanto las medidas que se ponen al servicio del empresario no tienen ninguna jerarquía ni prelación, lo que, a su juicio, llevará a un uso generalizado de las opciones de "máxima" flexibilidad, al final de las que, ha recordado, está el despido.

Además, mirando al futuro, Caldera ha asegurado que la reforma laboral hará que la economía tarde más en recuperarse al suponer un saco de medidas procíclicas entre las que no se incluyen las necesarias para lograr un cambio de modelo productivo que devuelva el crecimiento económico.

En este sentido, ha precisado que, en tanto generará una "enorme rotación" de trabajadores, no se incentivarán las políticas de formación en las empresas, al tiempo que la reforma no dedica especial atención a los sectores que pueden ser capaces de exportar. "No hay políticas positivas en este sentido en la reforma", aseveró.