Almunia advierte de una posible disminución del crecimiento a medio plazo si el 'boom' de la vivienda llega a su fin
BRUSELAS, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea dictaminó hoy que el programa de estabilidad de España para el periodo 2006-2009 constituye un "buen ejemplo" de política presupuestaria "sólida", al mismo nivel que las de Dinamarca o Finlandia. No obstante, reclamó al Gobierno más reformas de las pensiones y la sanidad para reducir los costes ligados al envejecimiento de la población con el objetivo de garantizar la sostenibilidad a largo plazo de las finanzas públicas.
"Junto con Dinamarca y Finlandia, que ya han sido examinadas, España supone un buen ejemplo de políticas fiscales ajustadas al pacto de Estabilidad y Crecimiento", destacó el comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia. "Es una política prudente a la luz de los crecientes desequilibrios exteriores, el diferencial de inflación con la zona euro y, como sucede en la mayoría de los países de la UE, los costes futuros del envejecimiento de la población", añadió, reclamando al Gobierno que "utilice la estabilidad presupuestaria para equilibrar la inflación y la balanza de cuenta corriente".
Almunia recordó que, de acuerdo con las proyecciones de la Comisión, España es uno de los países europeos donde más aumentará el gasto ligado al envejecimiento de la población de aquí a 2050. Este aumento, prosiguió, quedará atenuado en parte por una corrección "favorable" de las previsiones demográficas gracias a la inmigración; por el mayor aumento de la tasa de empleo que en el conjunto de la UE, y por la situación de superávit presupuestario.
"Pero a pesar de la mejora demográfica, a pesar de la mejora de los niveles de empleo y a pesar de la política fiscal, todavía queda un trecho por recorrer para poder garantizar una posición sostenible de las finanzas públicas en el largo plazo en España, y a eso deben contribuir ajustes en los sistemas de pensiones y una vigilancia muy estricta sobre la evolución del gasto sanitario", recalcó el comisario de Asuntos Económicos.
Preguntado por el tipo de medidas que necesita el sistema de pensiones español, Almunia dijo que "no hay de descubrir nada" sino que "leyéndose los acuerdos que ya han sido alcanzados por parte de los partidos políticos, y del Gobierno con los interlocutores sociales se deducen claramente las líneas de las reformas necesarias", en referencia a las contempladas en el Pacto de Toledo.
'BOOM' DE LA VIVIENDA
Bruselas considera "plausibles" las previsiones de crecimiento en las que se basa el programa de estabilidad español, que apuntan a una reducción desde el 3,8% del PIB en 2006 al 3,3% de media hasta 2009. No obstante, alerta de posibles "riesgos a la baja" sobre este escenario "asociados a los desequilibrios de la economía, a saber, el creciente endeudamiento de los hogares y el creciente déficit por cuenta corriente".
"Un crecimiento menos optimista a medio plazo del que prevé el programa es una marcada posibilidad, especialmente si el prolongado 'boom' en la construcción residencial llega a su fin", advierte el Ejecutivo comunitario en su dictamen.
En cualquier caso, la Comisión valora positivamente que la actualización del programa de estabilidad tenga como principal objetivo mantener superávits presupuestarios "más ambiciosos" que los que había previsto en 2005, aunque se reducirán progresivamente desde el 1,8% registrado en 2006 hasta alrededor del 1% en 2009.
Bruselas destaca que España se ha fijado un objetivo a medio plazo de equilibrio presupuestario, que es más exigente de lo necesario por el ratio de deuda y el potencial de crecimiento medio. Este objetivo ya ha sido superado "por un amplio margen" y se mantendrá durante todo el periodo del programa, lo que "proporcionará una red de seguridad contra la aparición de un déficit excesivo".
Teniendo en cuenta que "los riesgos están equilibrados en términos generales", la Comisión cree que los objetivos presupuestarios establecidos en el programa de estabilidad español son "alcanzables". No obstante, alerta de la posibilidad de que el capítulo de gastos haya "algunos sobrecostes al nivel de las autoridades regionales si se confirman las tendencias pasadas en educación y sanidad".
La deuda seguirá reduciéndose hasta el 32% en 2009 desde el 43% en 2005 o el 60% en 1999. Bruselas señala que se trata de una política "prudente" teniendo en cuenta los costes del envejecimiento de la población. España se encuentra en una situación de "riesgo medio" por lo que se refiere a la sostenibilidad de las finanzas públicas, gracias a que la posición presupuestaria "favorable" compensa en parte el fuerte incremento previsto en los costes de pensiones.
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