La actividad económica se ralentiza un punto con respecto al trimestre anterior
WASHINGTON, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Producto Interior Bruto (PIB) de Estados Unidos aumentó un 1,6% en el tercer trimestre del año, lo que supone el ritmo más lento de crecimiento desde el primer trimestre de 2003, cuando la economía creció un 1,2%, anunció hoy el Departamento de Comercio.
El resultado trimestral es un punto inferior al del segundo trimestre y queda muy lejos del 5,6% marcado en el primer trimestre, cuando la economía estadounidense respondió con un repunte al deterioro en la actividad a finales de 2005 provocado por el Katrina.
La inversión privada registró la mayor caída desde el segundo trimestre de 2005, un 2%, a pesar de que la inversión residencial pasó de un descenso del 1,4% a un incremento del 6,4%, en un momento en enfriamiento del mercado de la vivienda.
Las importaciones aumentaron un 6,5%, tres décimas más, pero las importaciones lo hicieron a un ritmo muy superior, del 7,8%, lo que ensancha el déficit comercial. En el trimestre anterior, las importaciones habían crecido tan sólo un 1,4%.
El Departamento de Comercio aseguró que la fuerte ralentización se debe a la aceleración en las importaciones, al descenso en la inversión privada, a un descenso en la inversión fija residencial y a una caída en los precios.
Las ventas de ordenadores contribuyeron en 0,10 puntos porcentuales al resultado final, seis centésimas más que en el timestre anterior, mientras que la producción automovilística mejoró considerablemente su capacidad de influencia, al aportar 0,72 puntos del PIB, frente a los 0,31 puntos del trimestre anterior.
Las importaciones tuvieron una incidencia negativa de 1,28 puntos sobre el resultado final, lo que quedó en parte compensado con la incidencia positiva de 0,70 puntos de las exportaciones. La inversión fija tuvo un efecto negativo de 0,24 puntos.
Tras la publicación del dato, el euro se fortaleció con respecto al dólar y superó la cota de los 1,26 dólares. En concreto, la divisa europea costaba 1,2715 dólares, frente a los 1,2678 dólares de primera hora de la mañana.
CAÍDA EN LA CONSTRUCCIÓN.
Pese a la mejora en la inversión residencial, la inversión en construcción se situó en niveles desconocidos desde 1991, lo que supone un nuevo indicio de que el mercado de la vivienda estadounidense se desacelera.
El gasto en la construcción de viviendo cayó un 17,4% en el tercer trimestre, el mayor descenso desde el primer trimestre de 1991, cuando el indicador registró un retroceso del 21,7%.
La difusión del dato de hoy sobre el PIB podría influir en las elecciones legislativas que se celebrarán en el país el próximo 7 de noviembre. El porcentaje de aprobación del presidente George W. Bush se sitúa cerca de los niveles históricos más bajos y, según un sondeo difundido hoy, los demócratas han aumentado su ventaja sobre los republicanos y se harían con el 56% de los votos, frente al 37% de sus rivales.
CONTENCIÓN DE PRECIOS.
La ralentización servirá al menos para que la inflación se contenga y para que la Reserva Federal (Fed) no aplique nuevas subidas de tipos. El Índice de Precios de Consumo (IPC) se redujo un 0,5% en septiembre con respecto al mes anterior, y se situó en un 2,1% en tasa interanual, según anunció la semana pasada el Gobierno norteamericano.
Esta caída obedece principalmente a una ralentización del crecimiento de los precios de la energía, que se abarató un 7,2%, tras una subida del 0,3% en agosto. La inflación subyacente, que excluye energía y alimentos frescos, aumentó un 0,2% en septiembre y se situó en el 2,9% interanual.
Esta semana, la Fed mantuvo los tipos de interés en el 5,25% por tercer mes consecutivo. La autoridad monetaria estadounidense decidió en su reunión del mes de agosto romper con la política alcista de tipos de interés iniciada en junio de 2004 y mantuvo los tipos en los niveles actuales.
La decisión fue tomada por mayoría, con 10 votos a favor y uno en contra, el de Jeffrey M. Lacker, que defendía un incremento de un cuarto de punto porcentual. El equipo de Ben Bernanke destacó en el comunicado que el crecimiento económico se ha ralentizado en el transcurso del año y que en parte, refleja un enfriamiento del mercado de la vivienda norteamericano.
