Insta a la autoridades españolas a acometer reformas estructurales para reducir los niveles de inflación en el sector servicios
MADRID, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
El comisario europeo para los Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, advirtió hoy de que si los precios de la eurozona sufriesen un efecto de segunda vuelta, tras las últimas subidas del crudo, podrían entrar en una espiral inflacionista previa a una situación de estanflación (coyuntura de incremento de precios y estancamiento del crecimiento económico).
"Es muy importante que no haya efectos de segunda vuelta", señaló Almunia antes de apuntar que "si con ocasión de estos 'shocks' externos de precios se desencadena una espiral inflacionista, entonces entraríamos en un proceso que nadie quiere mencionar, de estanflación, que es la pesadilla de todos".
Así, lo aseguró hoy el comisario para los Asuntos Económicos y Monetarios de la Comisión Europea durante su participación en los desayunos informativos organizados por Europa Press.
En cualquier caso, aseguró que, pese a las actuales "tensiones inflacionistas", los niveles de inflación en la zona euro rondarán el 2,1% en 2008, ligeramente por encima del objetivo del Banco Central Europeo (BCE), del 2%. Si bien, reconoció que todo dependerá de la evolución futura del precio del petróleo, algo que consideró "difícil de prever" al depender de riesgos de naturaleza no estrictamente económica.
Por otro lado, Almunia hizo hincapié en que la existencia de "diferenciales de inflación persistentes" en el seno de la zona euro, entre ellos el de España, supone un "problema", ya que, a su juicio, indica que los ajustes interiores en el funcionamiento de la Unión Económica Monetaria "no están funcionando como deberían funcionar".
En este punto, afirmó que el eurogrupo se encuentra debatiendo en qué medida influye la determinación de los salarios en esas inflaciones persistentemente más elevadas.
ESPAÑA DEBE ACOMETER REFORMAS ESTRUCTURALES.
En el caso de España, Almunia puso de manifiesto que el sector servicios, "el sector protegido de la competencia exterior", cuenta con una inflación persistentemente por encima de la media, lo que reclama mejoras de carácter estructural referidas a la productividad o a la regulación de los mercados.
En este sentido, precisó que las medidas a tomar se encuentran incluidas en el Plan Nacional de Reformas español. "Lo que hay que hacer es adoptarlas y esperar a que tengan los efectos deseados", apostilló.
EE.UU. COMIENZA A PREOCUPARSE POR LA DEVALUACIÓN DEL DÓLAR.
Por otro lado, Almunia precisó que comienzan a apreciarse signos de preocupación entre las autoridades estadounidenses ante la progresiva pérdida de valor del dólar frente al euro, ya que, dijo, "quieren reducir el déficit exterior, pero saben que no pueden arriesgarse a que los inversores huyan de los activos en dólares".
"Me da la impresión de que, así como en el principio de la pérdida de valor del dólar las autoridades de EE.UU. daban la impresión de verlo todo con tranquilidad, ahora empiezan a percibirse síntomas, gestos y matices de una cierta intranquilidad", aseveró.
En este mismo sentido, no descartó que vaya a introducirse algún "matiz" en las próximas comunicaciones al respecto del G7, foro que, pese al cambio en la situación cambiaria, aún no ha variado sus mensajes, según Almunia, desde febrero de este año.
Por otro lado, Almunia precisó que la apreciación del euro ha afectado negativamente a las exportaciones de la zona euro, si bien, apuntó que se han producido otros dos efectos que han "más que compensado" este impacto.
En primer lugar, se refirió al incremento del comercio mundial, que ha permitido la entrada en mercados con altas tasas de crecimiento económico, y, en segundo, a la "extraordinaria competitividad" de ciertos sectores europeos, que siguen teniendo una cuota de mercado importante con independencia del tipo de cambio.
LONDRES PODRÍA DAR EL 'SÍ' AL EURO.
Por otro lado, Almunia sugirió que la entrada de Gran Bretaña en el euro podría estar cerca. Así, consideró que, de momento, los argumentos para tomar esta decisión no han sido "suficientes", pero que "habrá que ver qué pasa en los próximos años".
En este sentido, el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios indicó que las condiciones económicas han cambiado en el seno de la zona euro. Ahora, dijo, el sector financiero pasa por un momento más difícil que el resto de los sectores, a lo que se une que las previsiones de evolución de la economía británica "no son tan buenas como las que tenía".
"Gran Bretaña va a tener que pasar por un periodo en el que crecer en la media de la zona euro le va a resultar más difícil de lo que le ha resultado hasta ahora", señaló Almunia para añadir a renglón seguido que "como los británicos son muy pragmáticos, habrá que ver si en los próximos años consideran que les puede venir bien pertenecer a la segunda moneda del mundo y la más creíble".
