El comisario no es partidario de seguir "al pie de la letra" previsiones como la del FMI
MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Competencia, Joaquín Almunia, ha asegurado que la eventual petición de ayuda por parte de España rebajaría el coste de financiación de la deuda y también el de la actividad privada, sobre todo el de las pequeñas y medianas empresas.
Almunia, en declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, ha señalado que no sabe si al final se pedirá o no porque es el Gobierno español el que tiene que valorar "los pros y los contras" de una medida de ese tipo y tomar una decisión.
Según Almunia, las soluciones en Europa tienen que ser conjuntas, aunque los países tienen que estar dispuestos a resolver sus problemas nacionales y pueden recurrir a los elementos de solidaridad. Otro de estos elementos es la línea de crédito para asistir al sistema financiero que, según el comisario, no superará los 60.000 millones a los que ascienden las necesidades de capital según Oliver Wyman.
Preguntado por las declaraciones del ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, en las que afirma que España no necesita ningún rescate, Almunia ha dicho que no sabe si Schäuble es una persona "desinteresada" en esto, aunque siempre ha hecho muchas cosas por Europa.
Además, ha dicho que a los alemanes tampoco les interesa que otros países tengan problemas, ya que esas dificultades pueden afectar a sus empresas porque en Europa los intereses son cada vez "más comunes e interdependientes".
Sobre si España tiene que aprobar nuevos ajustes, Almunia sólo ha recordado que, en algunas ocasiones, hay que tomar este tipo de medidas a corto plazo para solucionar el fondo de los problemas. "Es la única forma de superar el bache y poder crecer sobre una base sólida", ha dicho.
En cualquier caso, ha pedido que se diferencie entre los políticos porque algunos son partidarios de tomar unas medidas y no otras y porque la democracia permite elegir entre diferentes opciones. "No se debe poner a todos los políticos en el mismo saco", ha dicho, tras mostrarse contrario a las protestas en el parlamento español.
En cuanto a los que le acusan de ser portavoz de la oposición española y desleal, Almunia ha contestado que solo habla como vicepresidente de la Comisión. "Trato de ser prudente siempre", ha dicho, tras asegurar que su relación con el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, es muy buena.
PREVISIONES DEL FMI
Preguntado por las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI), Almunia ha declarado que no es partidario de seguir las estimaciones "al pie de la letra" dada la volatilidad de la situación económica. "Las previsiones no son una ciencia exacta", ha asegurado.
A su parecer, hay que usar los datos del FMI como un elemento de reflexión porque no hay que seguir lamentando la recesión y la falta de empleo, sino centrarse en las decisiones que hay que tomar.
PONE LA MANO EN EL FUEGO POR EL EURO
Finalmente, el comisario ha negado estar detrás de las supuestas filtraciones a Reuters sobre el rescate español y no ha querido entrar a valorar la prohibición de Grecia a manifestarse ante la visita de la canciller alemana, Angela Merkel, y se ha limitado a apostar por rebajar la tensión porque en todos los países se han dicho cosas de otros que no gustan. "Hay que calmar y serenar el debate", ha subrayado.
En cualquier caso, ha asegurado que pondría la mano en el fuego por el euro, ya que la moneda es como los "matrimonios antiguos" que había antes de que se legalizara el divorcio: "para siempre, con problemas pero con un vínculo irrenunciable". "No puedo imaginar ni por un momento que vaya a haber una fractura", ha dicho.
