La Cámara de Comercio España-Israel potenciará relaciones bilaterales que podrían aumentar la competitividad de España
MADRID, 28 May. (EUROPA PRESS) -
Los intercambios comerciales entre España e Israel superarán el billón de euros en 2006, después de un incremento moderado durante el año 2005, según apuntó el presidente de la Cámara de Comercio e Industria España-Israel, Gil Gidron. En el mes de febrero el importe de los intercambios por importaciones y exportaciones ascendió a los 93,5 millones de euros, un 24,9% más que los 74,82 millones registrados en el mes anterior.
Gidron aseguró, en declaraciones a Europa Press, que "están madurando las relaciones entre los dos países y han empezado a desarrollarse en campos nuevos". Sin embargo, sigue existiendo un desequilibrio en la balanza comercial ya que frente a los 41,27 millones de euros que suponen las exportaciones españolas a Israel, las importaciones de productos israelíes alcanzan un valor de 52,23 millones euros, según datos de febrero de 2006 aportados por el Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX). La exportaciones españolas a Israel cayeron entre 2001 y 2004 un 41,2%.
Además, según el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, las inversiones israelíes en España en 2005 sumaron 3,47 millones de euros mientras que el capital español con fines inversores en Israel no superó los 0,15 millones en el mismo año. Gidron achacó estas escasas inversiones a la falta de competitividad que sufre España.
"España es un país estable, con un mercado común, con buenas puertas a Latinoamérica y buen enlace con los hispanoparlantes en EE.UU.. Es un país, sin embargo, que ha perdido competitividad, porque tiene dos problemas históricos, el coste laboral y la oportunidad de devaluación de la peseta, que ha desaparecido", subrayó Gidron, añadiendo que "el futuro es competir con arreglo a conocimientos e innovación, dos asignaturas pendientes de España".
Gidron manifestó el interés de la Cámara por establecer relaciones bilaterales que aporten competitividad a España y estabilidad a Israel. Según el presidente de la institución, las empresas españolas necesitan del potencial tecnológico y de investigación israelí, mientras que Israel carece de la estabilidad del mercado español y necesita su valor estratégico como puente hacia Latinoamérica. De hecho, sus exportaciones supusieron el 60% de la aportación al crecimiento de la economía en 2004, de ellas, sólo el 4% se dirigieron a Latinoamérica.
Israel, con 6 millones de habitantes, ocupa el segundo lugar, después de EE.UU., en el ranking de países con más empresas en el Nasdaq. Además, invierte en I+D más del 4% del PIB, mientras que en España esta cifra se sitúa en torno al 1%. No obstante, sus exportaciones de alta tecnología ascendieron en 2004 hasta los 14 billones de dólares.
El movimiento de empresas de Israel a España está siendo mayor, hasta el momento, a juicio de Gidron, por el poco conocimiento que existe del mercado israelí y por la baja competitividad española en el exterior, cuestión que, en su opinión, se puede corregir desde la colaboración entre los dos países.
Otras de las causas de esta menor inversión española en Israel son la apreciación del euro en relación al shekel en los dos últimos años (más de un 30%) así como las reticencias de las empresas españolas a viajar a Israel por motivos de seguridad.
España goza, sin embargo, de una imagen muy positiva en Israel y muchos sectores son potencialmente rentables allí. Los muebles y lámparas, el calzado, la confección, los productos alimenticios, los juguetes, los respuestos de vehículos o el aceite de oliva son algunos de los productos que tienen bastantes posibilidades de entrar en el mercado israelí.
ALGO MÁS QUE MERAS EXPORTACIONES
La Cámara de Comercio e Industria España-Israel pretende establecer algo más que contactos exportadores. "Cuando hablamos de relaciones comerciales hay que pensar en una abanico más amplio. Son comerciales, bilaterales, de productos y servicios, son inversiones y relaciones de educación", señaló Gidron, quien recurrió al símil diciendo "no queremos una mera relación de exportación, sino una en la que se sembrarán semillas que darán sus frutos".
Gidron se mostró consciente de que la situación es compleja y de que cualquier evolución no va a ser inmediata, sin embargo, señaló que el panorama es optimista.
Dentro de esta concepción de los vínculos que pretende impulsar la Cámara, Gidron subrayó la importancia de establecer en España una cultura de la innovación. Ejemplificó el déficit español en este sentido denunciando la escasa relación que existe entre la innovación universitaria y el ámbito mercantil en nuestro país.
Gidron precisó que en Israel "existe la figura del chief scientist (jefe científico), que tiene una financiación a parte y decide los programas de innovación". "La ilusión de la cámara es coger este programa y adaptarlo en España. Con hacer el 30% de lo que ellos hacen ya daríamos un paso de gigante", apostilló.
Gidron abogó también por establecer fuertes incentivos fiscales a la innovación en España, algo que en la actualidad no se contempla en el sistema español, ni siquiera en el proyecto de reforma que se tramita en el Congreso. Por último, Gidron manifestó la necesidad de reducir los diferentes niveles de administración (Estado, CC.AA y local), dado que suponen una serie de estadios burocráticos que implican una gran cuantía de gasto dentro de la inversión general de las empresas.
La Cámara de Comercio e Industria España-Israel está empezando a trabajar en el establecimiento de nuevos vínculos comerciales. Ya cuenta con 60 socios y espera llegar a unos 100 a finales de 2006. Su andadura en España ha comenzado en Madrid y luego se trasladará a Cataluña, País Vasco, Valencia, Murcia y Andalucía. Estos últimos destinos responden a un gran interés de las empresas israelíes por la agricultura.
La Cámara tiene previstas, dentro de las acciones de difusión que pondrán en marcha, la visita a Israel antes de verano de la vicepresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, así como la del Príncipe de Asturias. Además, según Gidron, ya están en desarrollo muchas misiones de empresas tanto españolas como israelíes que tratan de poner en contacto a empresarios de ambos países. De hecho, se establecen entre una y dos misiones al mes, de ahí el optimismo del presidente de la Cámara de cara al año 2006. Por último, entre las actividades programadas se plantea impulsar los intercambios de estudiantes de ambos países.
