MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
UGT ha asegurado que los datos de Contabilidad Nacional de 2012 presentados este jueves contradicen los mensajes "optimistas" que intentó lanzar el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante el Debate sobre el Estado de la Nación, y ha pedido el cambio de una política económica "que está llevando a España al caos".
En un comunicado, la organización sindical ha aseverado que los datos de 2012 "ofrecen un panorama desolador y con escasas perspectivas de mejora". Según ha resaltado, lo que caracteriza a la evolución reciente de la economía española es "más paro, más recesión y más desigualdades, y apuntan lo que está por venir".
Para el sindicato, esto supone el "fracaso" de las políticas aplicadas por el Gobierno el pasado año. En su opinión, "la recesión, la falta de crédito y el sobrecogedor aumento del paro y las desigualdades no se debían a una supuesta falta de confianza generada por el Ejecutivo anterior, como el señor Rajoy repitió hasta la saciedad desde la oposición".
"Son las políticas aplicadas las que tienen la facultad de promover cambios en la evolución económica, y las medidas aplicadas por el Gobierno del PP solo han servido para agravar la crisis económica y de empleo", ha subrayado UGT.
Por ello, el sindicato cree que si no se modifican estas políticas, "el país estará condenado a más recesión, más paro y más desigualdad, pues cada vez son más los expertos e instituciones de análisis que afirman que estas políticas de austeridad irracional seguidas hasta ahora han sido contraproducentes".
PIDE INCLUIR UN TECHO DE GASTO SOCIAL EN LA CONSTITUCIÓN
UGT ha propuesto ha apostado propuesto que se plantee la inclusión de un suelo de gasto social en la Constitución para preservar los sistemas "esenciales" de prestaciones sociales y los servicios públicos fundamentales.
Asimismo, ha apostado por una reforma fiscal que eleve la recaudación de España, "que está muy por debajo de la media de los países de la zona euro", que aumente la generalidad y la equidad: "que todos paguen de forma justa y según su capacidad de pago".
Por último, ha exigido a las instituciones europeas que separen determinados gastos a la hora de computar el déficit y la movilización de más recursos para poner en marcha un plan supranacional de inversiones.
