Si las instalaciones públicas redujeran el consumo energético un 10% se ahorrarían cerca de 350 millones de euros, según la EPA
MADRID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) junto con otras agencias y departamentos gubernamentales han decidido adoptar una guía de principios de sostenibilidad a la hora de aceptar proyectos de construcción de edificios públicos. Con estas medidas, los organismos oficiales ayudarán a reducir el consumo de energía y el impacto sobre el Medio Ambiente que producen estas instalaciones.
La EPA informó en un comunicado de que participan en esta iniciativa el Departamento de Defensa y la Administración General de Servicios que tienen prevista la introducción de la sostenibilidad tanto en el diseño, como en la construcción y en la utilización de las instalaciones públicas de Estados Unidos.
En la nota, resalta que la eficiencia energética es "el elemento clave de estos principios", que se recogen bajo el título general de 'Memorando del liderazgo federal de comprensión para la adopción de principios orientativos para el alto rendimiento y los edificios sostenibles'.
En este sentido, el responsable de Administración y Gestión de los Recursos de la EPA, Luis Luna, advirtió de que el presidente del país, George W. Bush, solicitó la conservación de las fuentes energéticas, razón por la que los organismos públicos "están liderando el camino hacia la seguridad energética y hacia un Medio Ambiente más limpio".
Por otro lado, de acuerdo con los resultados obtenidos en la cumbre sobre Edificios Federales Sostenibles que tuvo lugar recientemente en la Casa Blanca, en la guía de principios de construcción se incluirán los aspectos de diseño, rendimiento energético, así como conservación del agua, calidad interior del aire y utilización de materiales sostenibles, con el fin de asegurar la proliferación de la eficiencia energética a lo largo de todo el país.
En esta línea, los materiales con los que se fabriquen los nuevos edificios "no podrán exceder los límites recogidos en el código energético". Además, el rendimiento energético "será verificado", durante el primer año en que esté operativo el dispositivo, mediante el sistema Energy Star desarrollado por la EPA.
GRANDES EXPECTATIVAS
Si en todas estas instalaciones se redujera el consumo energético en un 10%, en diez años los ciudadanos de Estados Unidos se ahorrarían cerca de 420 millones de dólares (casi 350 millones de euros) y ayudaría a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en una cantidad equivalente a la contaminación producida por 625.000 automóviles.
El sistema Energy Star es un programa desarrollado por la EPA que nació con el objetivo de ayudar a las empresas y a los consumidores a desarrollar acciones de protección del Medio Ambiente, a través de una mayor eficiencia en el uso de los recursos.
De esta forma, más de 8.000 organizaciones de los sectores público y privado se beneficiaron, durante 2004, de la ayuda aportada por la Agencia y por el sistema Energy Star. Estas instituciones consiguieron reducir sus emisiones de gases contaminantes en una cantidad equivalente a las emisiones de veinte millones de coches. Además, esta acción supuso un ahorro económico adicional de diez millones de dólares (más de ocho millones de euros).
