MADRID, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
Algo más de 1.000 empleados del Grupo Telefónica han participado ya en la Campaña lanzada el pasado mes de junio 'Euro Solidario', que tiene como finalidad recaudar fondos, a través de donaciones procedentes de sus propias nóminas, destinados a la financiación de diversos proyectos del Programa 'Proniño' para erradicar el trabajo infantil en América Latina a través de la escolarización.
Según recuerda el último Boletín de Noticias de la Fundación Telefónica, la aportación de cada empleado --un euro mensual-- es descontado de su nómina, y por cada euro aportado, la Fundación aporta otro. Hasta el pasado mes de julio, más de un millar de empleados ya se han convertido en donantes de su 'Euro Solidario'.
Para ello, previamente han debido registrarse como 'Voluntario Telefónica', en la web 'www.telefonica.es/voluntarios', y confirmar así el permiso para que la empresa descuente de su sueldo mensual el euro donado, siempre antes del día 10 del mes en curso para que esta donación sea efectiva en la nómina correspondiente. Los empleados pueden darse de baja en esta Campaña en el momento que lo deseen con el mismo sencillo procedimiento.
Los donativos irán destinados a 'Proniño', la iniciativa integral de acción social gestionada por la Fundación junto con Telefónica Móviles en Latinoamérica que tiene como objetivo acabar con el trabajo infantil a través de la educación de los menores y adolescentes que evite que sean "futuros excluidos" y romper el 'círculo de la pobreza'.
Fundación Telefónica no sólo facilita a cada niños la financiación necesaria para recibir una educación de calidad, sino que las aportaciones cubren también un seguimiento sanitario y una alimentación que, de no ser por el Programa, en muchos casos los menores no tendrían cubiertos.
Para la Fundación, 'Proniño' forma parte de su estrategia integral de actuación, atendiendo en la actualidad a 20.000 menores de doce países, entre ellos Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Panamá, Perú, Nicaragua, México o Venezuela. La idea es llegar a 22.000 niños a finales de año y a unos 40.000 en 2008.
