RSC.- Sindicatos internacionales se reunen en Bruselas para debatir sobre los derechos de los trabajadores migrantes

Actualizado: martes, 19 diciembre 2006 14:16

MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -

Cerca de sesenta sindicalistas y representantes de organizaciones internacionales especializadas se reunieron recientemente en Bruselas para participar en un seminario organizado por la Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres (CIOSL) sobre la situación laboral de los trabajadores migrantes y la defensa de sus derechos.

El objetivo del seminario fue triple, según explicó la directora del Departamento de Igualdad de la CIOSL, P. Kamalan, "en primer lugar, compartir información y experiencias sindicales sobre la promoción y defensa de los derechos de los migrantes", y en segundo lugar, "apoyar las iniciativas emprendidas en este sentido mediante asociaciones de sindicatos de países de origen y de destino para ofrecer servicios a los trabajadores migrantes, haciendo hincapié en las trabajadoras migrantes, que resultan particularmente discriminadas".

Finalmente, la idea fue también "redactar un Plan de Acción Sindical para la organización de los trabajadores migrantes y la promoción y defensa de sus derechos, de manera que puedan mejorar sus condiciones de vida y de trabajo".

Teniendo en cuenta que el reciente Congreso fundador de la CIOSL, celebrado en Viena el pasado mes de noviembre, situó la cuestión de la lucha contra todo tipo de discriminación laboral entre sus principales prioridades de acción, la secretaria general adjunta de la Confederación, Mamounata Cissé, inauguró este seminario insistiendo en que las organizaciones sindicales "tienen el deber de luchar para que la cuestión de los derechos de los migrantes se tome más en cuenta en el debate internacional".

Hasta el momento, opinó, el debate sobre la inmigración es un debate que "se centra exclusivamente en las cuestiones de seguridad, dejando completamente en la sombra el ángulo de los derechos de estas personas como trabajadores, y en particular sus prestaciones en tanto que llegan a los países de destino principalmente para trabajar", denunció Cissé.

Si se tiene en cuenta que de los 191 millones de migrantes que hay en todo el mundo, más de 90 millones son económicamente activos, la cuestión del trabajo decente "debe constituir un elemento central de las políticas relativas a las migraciones". En el país de origen, generalmente suele ser la falta de un empleo decente lo que empuja a los trabajadores a emigrar, "no por gusto, sino como una cuestión de supervivencia", explicó Cissé.

"En los países de destino, estos migrantes suelen quedar confinados a los empleos más precarios, difíciles y degradantes, es decir los menos decentes", agregó.

Para Patrick Taran, especialista en migraciones de la OIT, las migraciones --y el trato dado a los no nacionales-- "constituye actualmente la clave para reafirmar el combate del movimiento sindical para obtener el empleo decente, la protección social y el bienestar humano".

A su juicio, "la aplicación de un marco basado en los derechos a la no discriminación y a la igualdad de tratamiento para los migrantes es indispensable para la cohesión social mundial". Ello requiere que los sindicatos "basen su trabajo en la organización, la presión, el diálogo social y la acción sobre el terreno".