RSC.- Vodafone considera que, en materia de antenas, no ha "llegado" a los cuidadanos a pesar de su gestión responsable

Actualizado: martes, 30 mayo 2006 15:53

Según el catedrático de Medicina Juan Represa, "el miedo a las antenas es un problema de percepción social, no de salud pública"


MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -

Vodafone recoge en su programa de RSC aquellos temas relacionados con la sociedad y el Medio Ambiente, sin embargo, y según el director de Relaciones con la Administración de la empresa de telecomunicaciones, Miguel Udaondo, su mensaje "no ha llegado a la sociedad". "Si no es de este modo, no se explica la alarma social que causa la instalación de antenas de telefonía móvil", dijo.

Así lo manifestó el directivo durante la Jornada 'La Telefonía Móvil con el Medio Ambiente' organizada esta mañana en el hotel Palace de Madrid por Intereconomía Formación y Vodafone. Y prueba de lo anterior fue la protesta 'in situ' que protagonizaron un grupo de vecinos que se acercaron al hotel para protestar contra la instalación de una de estas antenas en su edificio.

Apenas unos minutos después del comienzo de la sesión, un grupo de vecinos de la calle Cavanilles desplegó una pancarta de protesta ante los ponentes contra la instalación de una antena de telefonía móvil en la azotea del edificio del número 40 de esta calle. Según expresaron, "la exposición a estas radiaciones puede ocasionar graves daños para la salud".

Sin embargo, las ponencias, tanto del directivo, como la del doctor Represa, investigador del CSIC y asesor del Comité de Expertos del Ministerio de Sanidad, se dirigieron a aplacar lo que el facultativo calificó de "preocupación social e incluso alarma en muchos casos", pero no de problema de salud pública.

En este sentido, Udaondo, aseguró que "con los límites que establece la normativa existente se garantiza la inocuidad de este tipo de instalaciones". Asimismo, explicó que, "con el aval de la física", la instalación de las antenas en las ciudades "no es perjudicial para la salud".

"Las antenas emiten siempre hacia delante, ni hacia atrás ni hacia abajo, por lo tanto tener una antena encima del domicilio no es peligroso", apuntó. No sólo la inclinación disminuye la potencia de las ondas electromagnéticas, "que como la radio, son de las que se sirve la telefonía móvil", sino también los obstáculos.

Según datos del doctor Represa, "sólo el 2% de las ondas de radio a las que estamos sometidos provienen de la telefonía móvil". Además, agregó, los niveles de potencia "están cientos de veces por debajo de los límites establecidos por la normativa", es decir, "dentro del principio de precaución".

DESPLIEGUE RESPONSABLE

En relación con lo anterior, Udaondoexplicó en qué consiste el 'Despliegue Responsable de Red' de Vodafone. Por una parte, "se trabaja con el principio ALATA ("Tan por debajo como la técnica permite", en sus siglas en inglés)". Éste consiste en que cuánto más cerca se encuentren la antena y el teléfono, "a menos potencia han de trabajar ambos", por tanto, el directivo consideró que "alejar las antenas es una barbaridad".

También la tecnología DTX (transmisión discontinua) permite reducir la potencia de emisión. "Cuando yo me callo, gracias a la DTX, el teléfono deja de emitir potencia" explicó.

Al igual que Vodafone "integra las antenas en el entorno", el directivo enumeró otras medidas para la "instalación responsable, que pasa por utilizar una sola antena entre varios operadores o aprovechar elementos existentes como soportes para sus antenas, que se aplican en la actualidad.

"Si no hay antenas no hay telefonía móvil", dijo. Para la empresa, "la alarma social" es perjudicial a la hora de prestar un servicio de calidad. Ante el próximo lanzamiento de la nueva generación de telefonía móvil '3G', adelantó que se requerirá duplicar el parque de antenas", por lo que animó a los medios "a divulgar las evidencias científicas que avalan la garantía de inocuidad".

Según estimó el catedrático de medicina, "hay una preocupación que en muchos casos es alarma", porque la telefonía móvil "es un tema sanitario resuelto". Los indicios de que no es un problema de salud se encuentran, apuntó el facultativo, "en la propia física", ya que "las ondas de radio no son ionizantes, es decir, son benignas".

"No sólo se cumple con las normas sanitarias", insistió, "sino que se emite muy por debajo de dónde la salud está garantizada". Además presentó conclusiones de estudios elaborados por varios organismos como la Sociedad Médica Británica o la Organización Mundial de la Salud (OMS) que coinciden en que "la evidencia actual concluye que no hay riesgo para la salud por la exposición a las ondas electromagnéticas". Por esto sentenció, "no hay ninguna relación causa-efecto entre el uso de móvil y el perjuicio de la salud".

BUENAS PRÁCTICAS

Por su parte, la coordinadora del Servicio de Asesoramiento Técnico e Información (SATI), de la que forman parte más de 770 Ayuntamientos de todas las Comunidades Autónomas, Mercedes Sánchez Salido presentó el código de buenas prácticas que pretenden "dé respuesta a las demandas con respecto al despliegue de las infraestructuras tecnológicas".

En este sentido, el SATI ofrece información sobre las tecnologías en cuatro áreas, la normativa, la técnica, la biomédica y la comunicacional. Así, "queremos que sea un instrumento para solventar cualquier conflicto", destacó.

El código, que recoge las prácticas que la Federación recomienda en cuanto a las áreas anteriores, tiene apenas cinco meses de vigencia. A pesar de esto, "el SATI responderá también para la aplicación del código", añadió.