Braun asegura que en "dos o tres meses" tomará una decisión sobre el futuro de su fábrica de Esplugues (Barcelona)

Los sindicatos crean un gabinete de crisis y piden la asistencia inmediata de un directivo de la multinacional

Europa Press Economía Finanzas
Actualizado: lunes, 20 marzo 2006 18:58

BARCELONA, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -

La dirección de la multinacional alemana Braun ha anunciado a los sindicatos que en un periodo de "dos o tres meses" tomará una decisión sobre el futuro de su fábrica en Esplugues de Llobregat (Barcelona), la única que el grupo posee en España y que emplea a 761 trabajadores.

En un comunicado a la plantilla, al que ha tenido acceso Europa Press, la dirección de Braun afirma que, según las conclusiones de un estudio realizado el año pasado por la consultora McKinsey, "tendremos que reducir nuestros costes de una manera significativa ya que nuestros costes de manufactura están muy por encima de la competencia".

Asimismo, la nota recuerda que la dirección de Braun en España encargó a un consultor externo que implementara sistemas de productividad en la planta de Esplugues para lograr "las necesarias reducciones de costes de una manera significativa".

Sin embargo, el comunicado, firmado por el vicepresidente de Manufactura de Braun, Christian Leonhard, subraya que hasta que no llegue a una conclusión sobre la incidencia en las mejoras de productividad, "no se tomará ninguna decisión".

"Estamos compitiendo en una categoría extremadamente difícil. La competencia es fuerte, la categoría es altamente sensible a los costes de manufactura y muchos de nuestros competidores fabrican en países de bajo coste", recuerda la nota, aunque aclara que la empresa no ha hecho ninguna declaración relacionada con el "potencial cierre de la factoría".

Braun es propiedad de la multinacional estadounidense Gillette que, a su vez, forma parte de la también estadounidense Procter & Gamble. En su fábrica de Esplugues produce del orden de nueve millones de unidades de planchas de vapor y batidoras para todo el mundo.

GABINETE DE CRISIS.

Por su parte, los sindicatos Comisiones Obreras, UGT y CGT decidieron hoy crear un gabinete de crisis para hacer frente a la situación de la factoría, después de que el pasado viernes se apuntara a un posible cierre de la misma.

El gabinete estará formado por seis miembros de CC.OO., seis de UGT y dos de CGT, tanto del comité de empresa como de las respectivas federaciones sindicales, y su primera medida será dirigir una carta a la dirección de la multinacional para pedir la inmediata asistencia de un directivo que aclare si la compañía prevé cerrar la fábrica o no.

En este sentido, el secretario general del Metal en UGT del Baix Llobregat, Juan Antonio García, explicó hoy a Europa Press que los sindicatos consideraron "totalmente insuficiente" el comunicado de Braun y recordó que "se le pide que diga que es mentira" que vaya a cerrar la fábrica.

García también indicó que una probable iniciativa del gabinete de crisis será pedir la participación en el conflicto de la Conselleria de Trabajo e Industria de la Generalitat.

ESTUDIOS ANTERIORES.

El pasado mes de octubre, Braun descartó deslocalizar la producción de su planta después de que la matriz cuestionara la continuidad de la fábrica.

El entonces director de Braun en España, Josep Taulats, explicó que la dirección española "convenció" de forma "suficiente" a los responsables del grupo de las posibilidades de la fábrica para mejorar su rentabilidad, a través de los datos aportados a la consultora McKinsey, responsable de un informe que evaluaba la posible deslocalización.

Taulats explicó que la planta continuaría produciendo planchas y batidoras, así como con su programa de mejoras a nivel productivo y organizativo para reducir costes. Asimismo, hizo un "reconocimiento" por la "actitud" de los trabajadores de la planta y el equipo directivo, que participaron en la "defensa" de la factoría.

Se da la circunstancia de que Taulats cesó en el cargo el pasado 1 de marzo y fue sustituido por el hasta entonces director financiero, Francesc Pons. El responsable de Recursos Humanos, Josep Castelló, también salió de la compañía.

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